Fui infiel en un hotel de parejas (Parte 2)
Fecha: 19/02/2023,
Categorías:
Infidelidad
Autor: hilda, Fuente: CuentoRelatos
... estaba arrastrando a un segundo orgasmo, que descargué en la boca de Rodrigo. Lucía había aumentado el ritmo de sus bombeos, buscando su orgasmo.
Luego Rodrigo me puso en cuatro al borde de la cama con mi cabeza cerca de Lucía y me la mandó por la vagina. Qué rica verga, me hizo delirar y estremecer. Comenzó a moverse muy fuerte y yo también lo hacía con feroces bombeos.
Lucía se bajó de Gustavo y lo hizo desplazar hacia mí. Ella había acabado, pero él no. Tomó su pija comenzando a chupársela y luego me la puso en la boca, dejando su rostro junto al mío.
Gustavo se movía para masturbarse con nuestras bocas que se alternaban. Ella aprovechaba cada cambio para besarme y meterme la lengua en la boca, cosa que me excitaba de sobremanera, más aún con las bombeadas que me daba Rodrigo, provocándome otro orgasmo feroz.
Lucía colocó 2 almohadas y lo guio a Gustavo a recostarse con su trasero sobre ellas, dejando su pelvis más alta y su pija muy dura, elevada apuntando con su botón hacia el techo como un misil.
Lucía había notado mi temperamento. Me sacó de la posición de su esposo y me hizo montar a Gustavo, tomando su verga y metiéndomela en la concha. Fue algo maravilloso volver a tener dentro de mí la magnífica poronga de mi macho. Mis bombeos no tardaron en surgir, por momentos profundos y por momentos violentos. Pero en ese trance sentí las manos de Rodrigo tomándome desde atrás por la cintura. Yo me detuve al borde de un nuevo orgasmo. Presintiendo lo que ...
... venía, me tomé las nalgas relajando mi culo.
Yo podía ver en el espejo lateral, como Lucía le chupaba la pija a su esposo. Luego la dirigió hacia mi ano y Rodrigo enterró su cabeza atravesándome el esfínter. Continúo presionando, yo separándome las nalgas para facilitar la penetración de ese grueso tronco y Lucía empapándolo con su saliva a medida que entraba. Yo me había aferrado a Gustavo y le mordía los labios. No tardé en sentir los testículos de Rodrigo tocando mi cola sobre la Pija de Gustavo que se movía entrando y saliendo de mí sin pausa.
Que placer. Que goce. Que delirio. Me dejé arrastrar al cúmulo de sensaciones febriles que me estaban prodigando esos dos animales con la colaboración de Lucía que gozaba con mi frenético viaje hacia la locura total. Uno, luego otro y luego uno más, mis orgasmos se sucedieron casi sin pausa mientras mi cuerpo se contorsionaba recibiendo esas dos fantásticas pijas.
Ellos también terminaron. Rodrigo me entregó su semen en el recto. Gustavo me volcó a su lado y se arrodilló tomando su pene para acercarlo a mi rostro.
Yo abrí mi boca y lo continué masturbando hasta que comenzó a eyacular. Sus chorros de leche fueron a parar todos a mi lengua y garganta, no dejé que se perdiera una gota. Luego Lucía tomó la pija para chupársela intentando limpiar algún resabio de semen mientras yo me tragaba toda la miel de mi macho.
Lucía muy sensual, les dijo a los hombres que ahora le tocaba a ella ser penetrada por ambos.
De inmediato ...