1. El Clan del Placer cap 1


    Fecha: 22/07/2017, Categorías: Incesto Autor: Crystal69, Fuente: SexoSinTabues

    Yacía desnudo y echado sobre el lecho matrimonial. El pene erecto en toda su altura, con las variadas venas recorriéndolo desde la base hasta la cúspide coronada por una pequeña y fina abertura. Se sacudía tiernamente mientras mi madre lo estimulaba con las manos y sus dedos masajeaban el escroto. La respiración de Aiden se hizo un poco más rápida. Vi que mamá sonreía de gusto. No me extrañaba. Ella tenía muchísima experiencia en las artes amatorias de nuestro clan. Sus tres esposos, mis tres padres, la tomaban varias veces a la semana, poseyéndola y rellenando cada uno de sus tres orificios principales. Yo lo había visto. Había visto a mamá sometida por tres de esos caballeros, con la vagina, el ano y la boca ocupada en brindarles placer a todos. —¿Ves? Una correcta incitación puede hacer mil maravillas con un hombre. Tienes que mover la mano así, de arriba hacia abajo. Acércate para ver mejor. Me moví hacia donde estaba ella. Mis pechos se bambolearon traviesamente. —Tus pezones están levantándose —sonrió mamá— ¿Estás lista? Frotándome la vagina, advertí una traviesa humedad que no estaba allí minutos antes. El vientre me bullía como si tuviera abejas corriéndome por cada órgano y la sangre martillaba en mis oídos. Le mostré mis dedos a mamá, y ella se los llevó a la boca para probarlos con exquisita expresión analítica. —Estás lista. Siéntate. Era una costumbre del clan que la madre supervisara la primera relación de su hija, y tenía, entre otras tareas, elegir al hombre ...
    ... adecuado y prepararlo para el acto. A mí me habían concedido el honor de dejar de ser una niña. Convertirme en mujer irremediablemente llevaba a este momento. Uno que mi mamá iba a registrar en el Santo Libro de Erina, nuestra diosa de la procreación y la familia. —Bien, adelante —asintió, remojando la pluma en el tintero y poniéndolo sobre la hoja apergaminada. Intercambié una mirada con Aiden. Mi primo y yo habíamos crecido juntos, y teníamos la misma edad. Él también se convertiría en hombre después de que su polla me llenara por completo. La ceremonia era para los dos. —¿No vamos a esperar a mi tío? —pregunté, mientras cruzaba una pierna al otro lado de Aiden y sus manos se posaban sobre mis caderas. —Mi hermano dijo que vendría, pero se ha tarda… —¡Lo siento! —exclamó tío Helm, entrando a la casa. Venía empapado por la tormenta que retumbaba afuera—. ¿Ya ha comenzado? Oh, Jenn ¿comenzaste sin mí? —Tu hijo ya está listo, y quisiera decir lo mismo de su padre. Todavía no comenzamos, pero ya estábamos a punto. Sacó su libro y remojó la pluma en el tintero. Ambos hermanos se pusieron uno al lado de otro, admirando con interés el momento en el que nos uniríamos. Aiden me sonrió. Claro. Para él no iba a ser doloroso. Coloqué su miembro justo en la entrada de mi virginal abertura. Era un miembro más largo que grueso, y estaba tan caliente que casi me quemó la mano. Les eché un último vistazo a mi mamá y a mi tío, y ambos me sonrieron, felices de que el hijo de cada quien iba a ...
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