1. Mi amigo dejó de ser fastidioso para mi esposa en una noche


    Fecha: 06/05/2023, Categorías: Fantasías Eróticas Autor: Saintdude1987, Fuente: CuentoRelatos

    ... en cuatro y pude ver como la humedad de su vagina empezaba a derramar una gota sobre sus muslos, finalmente me di cuenta que mi mujer estaba preparada para ser poseída por esa descomunal verga.
    
    Sin separar su boca de aquel mástil, mi mujer empezó a retirar su tanga por debajo de sus rodillas, esto acelero mi pulso, cuando finalmente pudo liberarla la arrojo hacia donde estaba yo sentado y sin pensarla la tome para darme cuenta que estaba empapada en sus propios jugos, mi instinto me hizo llevarla a mi boca y absorber ese néctar que fluía de los interiores de la cavidad ardiente de mi mujer.
    
    En un rápido movimiento mi mujer se incorporó y dejando una pierna sobre un costado de su nuevo amante, paso la otra pierna al otro costado, posicionando de cuclillas a la altura de aquella verga que brillaba gracias a la saliva de mi mujer, tomo con sus manos aquel hongo a punto de estallar sobre la entrada de su vagina y sin decir nada lo introdujo lentamente mientras su cara se descomponía de placer al sentir cada centímetro de esa piel ardiendo que poco a poco invadía su interior. Mi amigo en ese punto parecía haber recuperado un poco más la consciencia, ya que sin dificultad pudo invadir con sus palabras el ambiente diciendo “que apretada estas Laurita, pero ahorita voy a llenarte toda de verga”, un último empujón seguido por un gemido de placer que nunca había visto en mi mujer. Mi esposa se quedó inmóvil para tratar de acostumbrar su interior a ese miembro que llenaba cada ...
    ... espacio y con la punta de esa descomunal verga tocaba el interior de su cuello uterino, mi mujer gemía con cada ligero movimiento y con sus manos posados sobre el pecho de aquel nuevo macho que victorioso ante la situación, aplicaba unas nalgadas que arrancaban un gemido a mi mujer, esta solo pudo decir en su transe:
    
    “nunca había sentido una verga como la tuya”
    
    Para luego dirigirse hacia mí y decir…
    
    “lo siento mi amor pero tenía que decirlo” mi amigo cruzo su mirada con la mía y sin decir una palabra entendí como por acto de telequinesis que sus palabras serian “tu mujer ahora es mía”. La cara de Laura estaba descompuesta de placer y pude ver como mordía su labio inferior con los dientes, yo seguía sin poder responder nada.
    
    Cuando por fin pude ver que los huevos de Gerardo hacían contacto con las nalgas de mi mujer, supe que ese descomunal miembro había invadido por completo aquella zona que hasta esa noche me pertenecía, mi mujer entonces inicio una serie de movimientos arriba abajo ligeros que fueron subiendo de intensidad y que en cada rebote solo conectaba decir...
    
    “que rica verga cabrón, métemela toda por favor”.
    
    Lo cual obediente y jubiloso, comenzó una arremetida de embestidas que solo hacían rebotar a mi mujer y entrecortar sus gemidos que invadían mi cabeza con cada estocada, yo estaba ahí viendo los senos de mi mujer rebotar sin control, su cabello invadía su cara y las manos de aquel conquistador encajaban sus uñas en las protuberantes posaderas de ...
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