1. Cuatro contra una


    Fecha: 28/05/2023, Categorías: Sexo en Grupo Autor: subtitulados, Fuente: CuentoRelatos

    ... reír y me interesaba mucho lo que decía, ¡la historia de ese pueblo y la historia de su ex esposa!
    
    L: Jajá, ¡qué buena platica y que sabio salió usted!
    
    G: ¡Uhm, gracias hermosa!
    
    L: ¡Solo tengo una duda, su esposa no era celosa!
    
    G: ¡Nena, mi mujer y yo éramos swinger!
    
    L: ¡No!!! ¿En serio?
    
    G: ¡Si, lo fuimos hasta antes que ella enfermara de cáncer, o sea tengo 4 años sin ir a un club!
    
    L: Pues le confieso que mi esposo y yo, ¡también somos swinger!
    
    G: ¡Mira nada más, qué casualidad jajá!
    
    Lo mire coqueta, honestamente el hecho de saber que fue swinger me daban ganas de probarlo, él no se quedaba atrás inmediatamente su mano acaricio mis piernas, y se juntó más a mí, me endulzaba el oído, tratando de generar una excitación en mí, ¡me abrazo y me susurro al oído!
    
    G: ¡Si gustas te puedo mostrar lo bueno que soy!
    
    L: ¡No pierde el tiempo eh!
    
    G: ¡Una ricura como tú y además swinger, hay que aprovechar!
    
    L: Jajá, ¡pues como que si lo necesito!
    
    G: ¡Vamos a mi cuarto está en la parte de arriba!
    
    L: ¿Y los chicos?
    
    G: ¡Ellos se quedarán trabajando!
    
    Acepte a tener sexo con ese hombre, ya en su habitación el tipo fue muy pasional, me quito la ropa con besos y caricias, eso me prendió poco a poco, sentía sus labios recorrer todo mi cuerpo, su lengua iba por mi cuello, ¡bajando por mi espalda hasta perderé en medio de mis nalgas!
    
    ¡El señor era bueno, me estimulaba rico son su lengua y sus manos, el sexo oral era maravillosos, la formad e ...
    ... masajear mi clítoris y estimular mi ano, yo ya estaba jadeando de placer!
    
    L: ¡Gaby, que rico!
    
    G: ¡Que cuerpazo, que coño, mami que rica!
    
    Me acosté en su cama, ¡él se quitó la trusa y dios! Una verga de unos 20 cm colgaba de su pelvis, la llevo directo a mi cara, yo la saboree como dulce, dándole pequeñas mordías y besándole la cabeza, ¡poco a poco se fue endureciendo más!
    
    Le mostré lo buena que era mamando, tragaba toda de un solo golpe, le apretaba sus testículos y le bajaba el cuero con mis dientes, él estaba fascinado, ¡gemía y gritaba del placer que sentía!
    
    G: ¡Mamacita que rico!
    
    L: ¡Uhm! ¡Que deliciosa!
    
    G: ¡Agh!, ¡nena, me matas!
    
    L: ¡Si, grita nene, goza!
    
    Después de hacerlo gozar con mi boca, comencé a cabalgarlo, lo hacía rápido, honestamente quería calar su resistencia, mis mejores movimientos de cadera los sacaba a relucir, el me apretaba las tetas y las mordía, gemía y también se movía rico, ¡yo estaba fascinada con su trabajo y ver como resistía me excitaba aún más!
    
    Me puse en cuatro y el me penetro fuerte, su deliciosa verga me empalaba deliciosos, el tipo me daba de nalgadas y grababa el momento, yo se lo permití además jamás volvería a verlo, movía mi cuerpo también para sentir más su dureza, el aguantaba mucho, gemía, pero no se venía, ¡eso me ponía más y más a mil!
    
    L: ¡Así papi, así!
    
    G: ¡Agh, nena, dios!
    
    L: ¡Que rico coges, sigue, sigue!
    
    G: Que nalgas más ricas, ¡que diosa!
    
    Me acosté y e me cogió de misionero, me besaba ...