Amigo congresista
Fecha: 09/06/2023,
Categorías:
Bisexuales
Autor: Mario Emanuelle, Fuente: CuentoRelatos
Joaquín es el típico muchacho de barrio, con códigos bien aprendidos en cuanto al papel del hombre en la sociedad. Le fue muy bien en los estudios y con la ayuda de su padre, un abogado respetado en el ámbito comercial, pudo abrirse camino en el mundo de los negocios gracias a su olfato poco común y sus conocimientos de marketing. De ese modo, aún joven, pudo establecerse con una empresa de comercio exterior y por ello, viaja mucho. Por negocios siempre solo, por placer, con bastante continuidad, con su esposa Mariana, una morocha infartante, compañera de facultad, con quien fueron descubriendo, en diversas partes del mundo los placeres del sexo, más allá del lecho conyugal. Todo comenzó un día en New York cuando decidieron visitar un spa que descubrieron merced a un folleto que estaba sobre el escritorio en la suite del hotel. Hacía tiempo que les rondaba la idea en la cabeza de "hacer algo distinto" y al ver las fotos de los anfitriones, masajistas y escorts, con unos físicos espectaculares, Joaquín le preguntó a Mariana: ¿Querés ir a chusmear? La respuesta no se hizo esperar ¡Dale, vamos!
Pidieron un masaje para ambos y seleccionaron a un par de profesionales del catálogo.
Dos camillas paralelas, luz tenue, música suave, aroma de flores y manos seguras, les transportaron en pocos minutos a otra dimensión. Mientras ambos estaban boca abajo, los masajes fueron descontracturantes y con aceites, suaves, deteniéndose a determinada altura y con mayor presión en los ...
... glúteos de ambos, incluyendo en el caso de Joaquín un masaje prostático que le hizo disparar la alarma interior, cuando se sorprendió gimiendo, entregado y a merced de las manos (y los dedos del masajista) que le abrían completamente el ojete. Miró a su mujer y vio como el negro que le había tocado, le introducía dos dedos en el culo y la hacia ronronear y contonearse.
Joaquín se dio vuelta y quedó de espaldas, boca arriba, mirando al rubio grandote que le sonreía al verlo con una erección que confirmaba su real estado de excitación. Sin palabras, con gran experiencia, el rubio comenzó a acariciar los genitales de Joaquín y con sutileza recorría suavemente todo el tronco de su verga, deteniéndose por instantes en la cabeza, acariciando con maestría, con todos sus dedos el glande hasta hacerlo acabar copiosamente.
A Mariana la hizo girar el negro. Cuando quedó boca arriba se apoderó de sus tetas y comenzó un abordaje de sus pezones primero y los dos globos luego, que la hicieron salir de su habitual equilibrio y comenzar a proferir pequeñas frases del estilo ¡qué divino!, ¡me encanta!, el negro le hizo una seña al rubio quien se acomodó acodándose en la camilla entre las piernas de la mujer y con su lengua, comenzó un trabajo en los labios de la concha de Mariana hasta introducirla como un estilete hacia adentro y apoderarse con sus labios del hinchado clítoris femenino sacándole su primer orgasmo.
El negro, sacó de su blanco pantalón de hilo una verga descomunal, digna de ...