Cuarentena
Fecha: 26/06/2023,
Categorías:
Sexo en Grupo
Autor: Teseo, Fuente: CuentoRelatos
... llamásemos si nos apetecía.
Yo salí de camino al supermercado mientras que Almudena aún no había acabado de vestirse, quedamos en vernos allí en unos minutos, estando en el supermercado me impacienté porque ella no llegaba y no podía llamarla al móvil, se lo había dejado en casa, tampoco quería llamar a casa de Juan, iba a parecer un celoso desconfiado. La vi entrar pasados unos veinte minutos, como estaba prohibido permanecer y andar por la calle o en los supermercados dos personas juntas hicimos como si fuésemos separados, al pasar cerca de ella le pregunté por lo bajo-“¿Qué de tiempo, no?, y ella haciéndome un gesto con las dos manos, una especie de circulito con los dedos pulgar e índice de una de ellas e introduciendo un dedo de la otra mano por ese circulito, me dijo por lo bajo y sonriente, “otro”.
Al llegar a casa me lo contó: - “justo antes de salir, Juan me empotró contra la pared, me bajó los pantalones y me dijo que no me podía ir sin que se corriera en mi coño”, entonces me volvió a follar, estuve a punto de tener el tercer orgasmo, me ha dejado muy caliente, ¿me comerías ahora el chochete cariño?, ¿no te gustaban los coñitos sucios?”. Almudena se había metido de lleno en el papel de una tía puta, puta, y a mía me ponía a tope. Nos metimos en el dormitorio, y tumbada en la cama le lamí el coño que estaba completamente dilatado y pringado de semen, algo podría ser mío, poco, ya que yo tengo unas eyaculaciones escasas, sobre todo sería de la última corrida ...
... de Juan, así hasta que tuvo su tercer orgasmo de la tarde, este si provocado por mí.
Esa tarde hablamos ampliamente sobre el tema, de cómo nos habíamos sentido cada uno y de cómo lo habíamos pasado, quedamos en que ya decidiríamos si la semana siguiente volveríamos a repetir y si invitaríamos también al vecino de Juan.
Todo lo anterior pasó el sábado veintiuno de marzo, el domingo volvimos a tocar el tema, yo notaba que a ambos nos daba mucho morbo lo que había pasado, lo mío era sobre todo morbo, pero mi mujer, además de morbo fue el disfrute de follar con Juan, me dijo que a mí no me cambiaría por él, ya que de mí estaba enamorada, pero reconocía que Juan follando era espectacular, y reconoció que lo dicho era verdad, que su polla le encantaba, que era mejor que la mía, y eso fue lo que empezó a darme cierta inseguridad, pero había que reconocerlo, el aparato de ese hombre es envidiable; finalmente le dije que prefería que no invitásemos al vecino de Juan, Almudena dijo estar de acuerdo.
Lo que os llevo contado lo escribí entre el domingo por la tarde en casa y ayer lunes por la mañana en mi oficina. Pero hoy martes por la mañana ha ocurrido algo que no me esperaba. Juan me llamó sobre las diez de la mañana y me pidió que le prometiese que esa conversación fuese totalmente confidencial, que no se la contase ni siquiera a mi esposa, yo totalmente intrigado le prometí confidencialidad absoluta. Me confesó que mi esposa le había llamado para ver si podía ir a su casa ...