1. La bragas sucias de Sajar


    Fecha: 07/07/2023, Categorías: Fantasías Eróticas Autor: Anónimo, Fuente: RelatosEróticos

    ... poderoso! Mis muslos eran gruesos y en ellos la sangre bombeaba energía y fuerza imbatible.
    
    Pero entonces comprobé que, a medida que ascendía por el camino de tierra, las nubes iban preñando de oscuridad el cielo en el horizonte. El viento comenzó a soplar con una fría violencia y entonces todo al rededor comenzó a anunciar una imprevista tormenta. Pensé entonces en los fuegos de San Juan ahogados por lluvia y mientras seguía corriendo enérgicamente en mi mente se introdujo una visión, una retorcida image de la lluvia apagando una hoguera y entonces un estremecimiento volvió a inocularse en mis entrañas. ¡Qué extraña visión! Pensé.
    
    Quise entonces correr más rápido aún. Quería acelerar mi pulso al máximo para que el esfuerzo y la fatiga sofocaran mi mente, pero fue en vano. En una fracción de segundo la imagen de la lluvia apagando la hoguera volvía a adentrase en mí. Llegué entonces a la planicie y comencé el zigzagueo por calles residenciales en la urbanización donde estaba la casa de mi hermana.
    
    Ahora todo estaba distinto de como estaba unos minutos antes cuando había salido a correr. Entre la penumbra los arbustos batían incesantes sus ramas y la lluvia comenzaba a cubrir todo con su fino manto. Finalmente giré en una esquina y me encontré entonces en la recta final, la larga calle en un cuyo remate se encuentra la residencia de la familia. De nuevo quedé paralizado.
    
    Aunque estaba lejos, podía distinguir la casa sin problema y de inmediato noté la ausencia de ...
    ... vehículos.
    
    -¡Maldita sea!- exclamé. Eso significaba que no habían vuelto aún y justo en ese momento comprendí lo inocente que había sido.
    
    No había triunfado, no había derrotado a Asmodeo con la fuerza de mi virtud. Me sentí ridículo, defraudado de mí mismo. Aquel poder que había experimentado era una ilusión o, mejor dicho, parte del engaño del demonio. Traté entonces de recuperar la calma. Me puse de cuclillas sobre el pavimento tratando de reaccionar. Incliné la cabeza y la apoyé sobre mi puño tratando de pensar y justó allí el dardo inmundo del deseo volvió a alcanzarme.
    
    ¿Cómo olerá esa sucia vagina de Sajar? -La duda maldita volvió a inocularse en mí.
    
    Me puse de pie explosivamente y comencé a correr con toda mis fuerzas hacia la casa. Mi razón se nubló. Solo repetía la misma pregunta una y otra vez -¿A qué olerá ese coño jugoso?-. Con cada formulación me decía palabras más hirientes, más sucias, más vulgares. -¿Cómo olerá esa sucia braga manchada por la inmundicia de esa joven descuidada? Y comencé a pensar nuevamente en Sajar deslizando sus bragas por debajo de la falda.
    
    Entré a la casa como un enajenado de deseo. Era una bestia enardecida, no me importó nada. Atravesé la sala en un segundo y en cuanto pisé el pasillo pude distinguir las bragas en medio de la oscuridad. Me dirigí hacia ellas sin freno alguno y como un poseído las levanté del suelo y las dirigí enérgicamente hacia mi rostro. Fue entonces cuando lo percibí por vez primera. Ese aroma animal, ...
«12...5678»