No robarás
Fecha: 16/07/2023,
Categorías:
No Consentido
Autor: Vial78, Fuente: CuentoRelatos
... estaba Facundo pero en un movimiento rápido logré ver qué continuaba con la cabeza gacha.
Luego de un rato Fabrizio me tomo de la cintura y me quito de encima de él me dijo:
"Ok, ahora vamos a ver cómo te ves desde atrás"
Y con una mano en el abdomen y otra en mi espalda me coloco en la posición que más me gusta; la del perrito.
Me tomo firme por las caderas y pasó su mano que previamente había ensalivado por mi conchita, coloco su verga justo en la entrada.
Yo esperaba la inminente penetración pero Fabrizio le dijo a Andrés:
"Andrés asegúrate que su esposo vea el espectáculo para que no le queden ganas de seguir robándome"
Andrés le dio un cachetazo en la nuca a Facundo y le dijo:
"Ya escuchaste mira o te obligo"
En ese momento facundo alzó la mirada y me vio directo a los ojos ya que Fabrizio se encargó de colocarme en la posición para que quedemos de frente.
Fue justo en ese momento que Fabrizio comenzó a cogerme duro sostenía mis caderas y me penetraba. Con cada penetración sentía sus bolas rebotar en mi monte de venus, intenté contener la excitación pero no pude y comencé a gemir mi cuerpo se estremecía. Nunca sabré porque, si fue la situación, o el hecho de que me estén viendo mi esposo y un extraño o la actitud de Fabrizio de macho dominante, pero no pude contener la excitación y tuve que bajar la cabeza y morder las sábanas para no gemir cómo una gata, no quería hacerlo para no humillar aún más a mi esposo.
Fabrizio continuo por un ...
... largo tiempo cogiéndome intercalaba el ritmo me sostenía firme de mis caderas y repetidamente me daba nalgadas. Mi esposo observaba impávido como su mujer era cogida por otro hombre y yo trataba de contener mi excitación.
Ya cansado de cogerme en esa posición Fabrizio quitó su miembro de mí vagina que para ese momento estaba muy húmeda e hinchada. Sin decir palabras coloco su verga en mi ano y comenzó a penetrar muy suavemente. Yo no dije nada, quedé en silencio sin hacer gesto alguno, mi intención era que Facundo no sepa lo que estaba por suceder.
Con mi esposo lo hacíamos seguido por detrás pero aunque a mí me gusta no siempre lo podía disfrutar ya que su pene es bastante grande y muchas veces provocaba un dolor incómodo.
Fabrizio continuó con su labor y de apoco logró dilatar mi ano logrando penetrar por completo, yo permanecí inerte. Comenzó a aumentar el ritmo de sus embestidas y con cada una de sus penetraciones más se dilataba mi ano y más lo disfrutaba, su tamaño era perfecto, me provocaba un placer inexplicable y sin dolor, con su mano derecha comenzó a masturbarme, tocaba mi clítoris que para entonces era un capullo de rosa queriendo eclosionar, se inclinó y susurrando a mi oído me dijo:
"Se nota que lo estás disfrutando como yo, tu conchita está demasiado húmeda, esto no lo puedo desperdiciar"
Saco su verga de mi culito y la introdujo en mi conchita, me cogía un rato por mi vagina y luego alternaba con mi ano, sentía como sus bolas rebotaban contra mi. ...