Pequeña obediente
Fecha: 25/08/2023,
Categorías:
Dominación / BDSM
Autor: Anónimo, Fuente: RelatosEróticos
Solo tenía una amiga, Marta, y 5 amigos, Carlos, de 19, Marcos de 18, Darío de 20, Daniel de 18 y Erik de 18.
Un día empezamos a jugar a verdad o reto, solo nos dábamos besos como mucho, pero nuestros amigos querían más y nosotras no queríamos perderlos, además, no podía pasar nada malo entre amigos.
También jugabamos a un juego de cartas que quien perdia hacia un reto, un día dijeron que solo nos quitariamos una prenda si perdíamos, la única regla que había era que como éramos menos chicas pues teníamos que quedar completamente desnuditas, y ellos no hacía falta. Aceptamos el juego.
La primera vez perdio un chico, la segunda fue Marta, mi amiga, que se quitó los zapatos, luego de muchas jugadas me di cuenta de que hacían trampa pero no dije nada porque no quería enfadarlos. Yo me quite los zapatos, la camiseta, el top que llevaba. Veía como Carlos me miraba las tetas fijamente. Quería taparme pero tenía que dejar que todo se viera, decían, pues sino, que sentido tenía el juego. Marta acabo completamente desnudita, con las piernas bien separadas. Yo me negaba a quitarme las braguitas, me daba vergüenza. Ellos comenzaron a enfadarse.
Darío: a ver, estas son las normas del juego, lo hemos dicho antes de empezar a jugar, la única forma de no hacerlo es impornerte un castigo. Pero no puedes negarte a cumplirlo. Una vez hayas renunciado a quitarte las braguitas, tienes que hacer el castigo que te digamos, no puedes volver atrás, no servirá de nada si te las ...
... quitas luego. Lo cumples si o sí.
Yo: haré lo que sea! No quiero quitarme las braguitas. Jope
Ellos estuvieron discutiendo cuál sería el castigo, durante un rato, mientras yo seguía con las tetitas al aire y en braguitas, y Marta seguía con su chochete expuesto.
Darío: hemos decidido ser buenos... Tan solo tendrás que dejar que te toquemos las tetas durante 5 minutos cada uno.
Me sentí humillada, me daba vergüenza pero tenía que dejarme hacer. Hicieron un sorteo para decidir el orden. 30 minutos manoseada... Sí, Marta también decidió participar en mi castigo.
Alguno me pellizcó los pezones, dolía, pero me aguanté.
Al día siguiente Darío quiso que fuera a su casa yo sola, que tenía que entender para que servía y disciplinarme. Al llegar me ofreció un zumo. Me lo bebí mientras charlabamos.
Darío: se que no te gusta hacer esas cosas pero eres nuestra amiga, eres una mujer y estás para eso, simplemente queríamos verte.
Yo: pero me daba vergüenza.
Darío: entonces por eso te castigamos, por desobedecer. Tuviste que aguantar los manoseos. Si haces caso no pasa nada malo. Sino, hay castigo.
Empecé a sentirme adormilada. Me costaba moverme.
Darío: te puse una pastillita para que seas obediente.
Me quitó la ropa. Miraba mi chochete, el cual, ni pelos tenía aún. Me dejó abierta de piernas.
Darío: ayer queriamos que te sintieras expuesta... Solo entre amigos, es normal bonita, solo queríamos ver este chochete.
Me hizo fotos al cochete. Se sacó el ...