Mi vecina cincuentona - Relatos Eróticos

Mi vecina cincuentona

... nalgada y nuevamente le dije que ella era la puta y que haría lo que yo quisiera, así que se acomodó tomo sus manos y abrió sus nalgas, yo estaba sorprendido, ni mi esposa me había entregado así de fácil su culo. Me puse un condón le aplique lubricante y me monte en la cama decidido a ver a esa madurita gozar su primer anal. Fue fácil, ya que la excitación de ambos ayudó a no sentir el dolor, estuvimos así unos minutos (pocos no voy a exagerar) y ella estaba gozando de lo más rico, sus gemidos la delataban y todo lo que hacía y le decía tenía como respuesta unos ricos gemidos.

Ella: mmmm que rico me coges, ahora veo por qué tu esposa está feliz contigo... Mmm que ricoooo

Yo: pues tu no estas nada mal, y de ahora en adelante cuando ella no esté quiero que vengas a cogerme conmigo...

Ella: así será mi amor ahhh mmmm que ricooooo dame massss

Cambiamos de posición en varias ocasiones pero lo que hizo que casi me viniera al instante fue cuando se montó en mí y comenzó a moverse como si de verdad fuera cabalgando, se agarraba las tetas y trataba de alcanzar su pezón para ella misma lamérselo, cosa muy extraña en un momento se acostó en mí y siguió meneándose muy rico, así como mi esposa lo haría cuando está a punto de venirse, me beso en la boca muy apasionadamente y yo agarraba sus nalgas al ritmo de sus meneadas de momento comencé a sentir que mi verga estallaría en cualquier momento y comencé a menearla más rápido y se ...

... estremeció se erizo su piel y fue ahí justo en ese momento cuando eyacule dentro de ella y ella lo hizo encima de mi tuvimos un orgasmo fabuloso al mismo tiempo, quedamos rendidos ella sobre mi hasta que mi verga salió de ella y comencé a sentir mi semen sobre mi verga en ese instante ella se levantó y comenzó tragar el semen y los restos que ella dejó también.

Yo: pero que rico lo haces, nunca pensé que hicieras todo esto.

Ella: pues algunas cosas me dijeron como debería de hacerlas para volverte loco y otras las hice porque me deje llevar por lo excitada que estaba...

Yo: ven acuéstate aquí, descansemos un poco... Tenemos dos días para esto y más...

Ella: si corazón de ahora en adelante ya no estarás solo cuando tu esposa se vaya de descanso, y sabes quiero presentarte a la vecina de aquí abajo ella también quiere que la hagas sentir esto, seguramente ahorita esta masturbándose como lo hace cada que escucha que aquí hay bien sexo...

Nos besamos un rato y nos quedamos dormidos, después decidimos ir a su departamento y ahí volvimos a coger, no supe si estaba planeado o no pero en la mañana al salir de su departamento paso la vecina que vive abajo del mío y me sonrió de una manera muy sugestiva, además de que observe su vestimenta muy provocativa, unos leggins negros ajustadísimos y una playera igual que hacía notar que no llevaba bra debajo y meneando su gran culo con descaro, ella es gordibuena pero ese será otro relato.