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Hetero
Fecha: 28/02/2022, Categorías: Gays Tus Relatos Autor: Nino Mcphee, Fuente: Relatos-Eroticos-Club-X
... volvió a atravesarme varias veces. Yo ya estaba entregado al hacer de este macho que sabía muy bien como usar su cuerpo para el disfrute de ambos. De pronto dos, tres embestidas intensas y un bramido de hombre. Sin aviso se había corrido en mi culo. Yo estaba exorbitado tendido mientras el me hacía el culo. Siento que la saca lentamente y la acerca a mi cara, agarrándome la cabeza me mete su verga en la boca. No podía creerlo. Esta hombre era de muchas palabras, pero era una bestia sexual. Le dejé su pene reluciente. Me dió tres vergazos en la cara y se fue a la ducha. Fui tras el y me metí bajo la regadera al lado suyo, pero no me miraba. Lo toqué y se quedó quieto. Comencé a tocar su cuerpo por todas partes. Sentí como se estremecía cuando pasaba entre sus nalgas. Me detuve más tiempo allí y el apoyó sus manos en la pared. Bajé y metí mi lengua profundo en ese agujero que ya mis dedos habían reconocido y preparado. Chupé con ansías de devorar su culo completo cuando noté que estaba erecto nuevamente. Quise tocar su pene, pero se hizo a un lado. Me puse de pie y me miró jadeante. Me besó muy apasionadamente, apretando mi cabeza contra la suya mientras con su boca recorría mi cara que acaba de perder entre sus ...
... nalgas. Me giró y me apoyé en la pared. Su verga nuevamente en la entrada de mi culo. Ahora fue el mismo quien puse saliva en mi agujero y entró brutalmente y sin esperar comenzó a meter y sacar su herramienta latiente, carnosa y caliente. Mis piernas tiritaban, pero el me abrazaba fuerte por la espalda. Me hizo bramar de placer. Mi cuerpo y el suyo estaban ensamblados bajo el agua de la regadera. Comencé a correrme cuando él tomó mi verga y me pajeó mientras ya llevaba casi treinta minutos culiándome. Puso su mano para recibir mi semen y luego lo metió todo en mi boca, me giró y me beso salvajemente, compartiendo con nuestras lenguas ese elixir sexual. Volvió a ponerme contra la pared, escupió el semen en su mano y la llevó a mi culo para lubricarme y embistió de nuevo hasta el fondo para comenzar a correrse otra vez y fundirse piel con piel bajo el agua por varios minutos, hasta que ambos reaccionamos ya compuestos. No habíamos cruzado mayor palabra, pero la comunicación y química sexual había sido increible. Leo me había follado como un profesional. Para hacerle más cómoda la estadía, no volvimos a tocar el tema, a menos que podamos tomar algún vino a solas. Señal de que podemos repetir la jugada de aquella vez.