1. Déjame ser yo


    Fecha: 26/07/2018, Categorías: Dominación / BDSM Autor: wastedLalo, Fuente: SexoSinTabues

    ... un gran esfuerzo, por eso les pido que ustedes también le den una oportunidad y si al principio se le escapa algún comentario extemporáneo por el hecho de verse sorprendido por nuestro peculiar modo de vida y de relacionarnos con los esclavos, no se lo tengan en cuenta. Su madre, Camila, miró a su hija con ternura. Le acarició el bello rostro con ambas manos y la besó en la nariz. Luego se abrazaron. Melissa respiró aliviada, su madre estaba con ella en ese proceso de convertir a su amado de Narco en acérrimo defensor de la peculiar institución. Tras la copiosa comida en la que Bryant disfrutó por primera vez en su vida de abundantes sobras que le permitió comer su ama Nitza, los hombres, Hesed y Gamaliel se retiraron a tomar el oporto y a fumarse un philie Los gemelos Sarah y Kendo se retiraron con sus esclavos a sus aposentos para hacer la siesta. , Melissa había preguntado por su Hattie. La esclava que no había parado de llorar desde que había visto a su ama por la ventana de su habitación que cada día limpiaba, aireaba, cambiaba las sábanas, arreglaba los vestidos, limpiaba los zapatos como si nunca hubiera marchado, no se había despegado de los pies de Melissa en todo el rato. Durante la comida la esclava ni siquiera había hecho caso a los pocos trozos de patata masticada que le había escupido al suelo, ni a los tendones, grasa y huesos del asado que le había dejado caer para que se alimentase. Todo su interés se centraba en venerar a su idolatrada y añorada ama. Y ...
    ... ahora, mientras las señoras tomaban una copita digestiva de alcohólicas hierbas la buena de Hattie parecía seguir igual de subyugada a los pies de su dueña. Las risas de Camila y de Melissa resonaban en el salón cuando se abrió la puerta y aparecieron Hesed y Gamaliel . Ambos sonreían abiertamente. Melissa se levantó de un salto sin percatarse que sus pies descansaban sobre los pechos de Hattie. Se los aplastó sin ningún tipo de preocupación, caminó sobre su cuerpo y se dirigió hacia su amado sin dejar de mirar a su padre que la sonreía. ―Todo arreglado, mi tesoro. Sólo es cuestión de que decidas fecha para la boda. Melissa y Gamaliel se fundieron en un profundo beso. El nuevo estado de casada le sentaba bien a Melissa, tanto como el de futura mamá. Hacía tres meses de la sonada boda y ya esperaba descendencia, lo cual colmó de dicha a los futuros abuelos. Gamaliel hizo un gran esfuerzo para adaptarse al estilo de vida. Hesed su suegro, se lo llevó una mañana a los barracones de esclavos donde le seleccionó un chiquillo de facciones aniñadas para que fuese su criado personal. ―Mejor no tener una hembra de criada. Piensa que tu criado estará a todas horas contigo. Si escoges una hembra acabarás preñándola y eso hara que tu esposa se sienta en extremo celosa. Mejor un machito de finas facciones. Podrás darle por el culo y cuando te apetezca una buena moza te das una vuelta por los barracones, eliges a la que te la ponga dura y luego, si la preñas, no pasa nada, porque hasta que no ...