CRECER A TIEMPO 4 - Relatos Eróticos

CRECER A TIEMPO 4

... papi! ¿Me puedo quedar un rato más?
-Nooo…, mi amor. Tengo que ir a la obra. 
-¡Pero si hoy es sábado!
-La construcción trabaja los sábados.
La tuve que convencer con un montón de besos y caricias, con metidas de dedos en el culo y la concha, con infinitas cantidad de chupadas y lamidas…, en el transcurso de varias decenas de orgasmos. ¡INTERMINABLE!
-Una acabadita más en la boca, mi amor…
Hice lo posible. Luego que se tragó lo que había logrado sacar, me la succionó hasta casi sacarme los huevos!
-Mi amor…, si querés quedate, pero yo tengo que bañarme e ir al trabajo.
-Nos bañamos juntos. ¡Te juro que no te la chupo ni te ofrezco el culo!
Fuimos a la ducha. No fui tranquilo. Dudaba de la promesa de la nena. Además de enjabonarme meticulosamente la pija…, me la chupa lo suficiente para pararla y “enjuagarla”. Al fin, luego de casi media hora, terminamos nuestras “tareas”. Nos vestimos. Clarisa avisó a la mami que salía. Yo me quedé media hora más. Tenía que recuperarme. ¡Así terminó el día más salvajemente sexual de mi vida!
Estaba en la obra cuando recibí el llamado de Clara.
-¡Que le hiciste a la nena!
-Nada… ¿qué le voy a hacer? Hicimos todo lo posible para seguir tus “consejos”.
-Clarisa me contó que se mandó como 200 orgasmos…
-¡Jajaja! ¡Qué exagerada!
-¡Me dijo que se venía cada 3 minutos gracias a tus cogidas!
-¿Vos te crees que yo puedo estar cogiendo cada tres minutos?
-…y que vos acabaste como treinta veces!
-¡Jajaja! ¡Eso es imposible! ...

... Necesitaba media hora para recuperarme…
-En una noche con vos yo acabo unas veinte veces cuando mucho…, y vos tenés 6 o 7 eyaculaciones…
-Es que ella la quería permanentemente en la boca…
-Sí, me lo dijo. Que le encantó tu “lechita”, como dice ella. ¡Lo más rico del mundo…! Y esta noche quiere ir de nuevo…
-¡Nooo! ¡Me va a matar! Necesito tres o cuatro días de “paz interior” para recuperarme.
-¡Jajaja! Me parece que esa chica SI va a necesitar cuatro pijas para calmarse ¿no?
-Tendrías que conseguirle varios chicos, como hiciste vos cuando tenías 16…
-Pero yo los había “probado” a todos…, y con todos me gustó. Ella no quiere saber nada si no es con vos…
-Tratá de convencerla…
-Veremos… Bueno…, te dejo en paz varios días.
-Me parece bien…
	Pasaron tres días en el cual las chicas me dejaron tranquilo. Me hacía falta. ¡Clarisa me había destrozado! Eso de que somos los hombres los que “destrozamos” a las mujeres no siempre es cierto. Si te agarra una como Clarisa… ¡sonaste!
El jueves al anochecer golpean la puerta. De acuerdo a nuestra convención, cuando viene alguna de ellas, luego de avisar, golpean, de manera que sé quién es. En este momento no esperaba a nadie. ¿Quién diablos?
	No me “preparé” para nada, como lo hago otras veces. Pensé en alguien que venía a vender algo. Cuando abrí… ¡casi me caigo de culo! Clarisa y una nena riquísima bastante menor que ella.
-¿Qué hacés acá?
-Y… nada… Vengo a presentarte a mi hermanita Aldana. ¿No sabías que tenía una hermana ...