-
LA PATRONA EXIGENTE 3
Fecha: 01/08/2022, Categorías: Hetero Tus Relatos Autor: Caramelo, Fuente: Relatos-Eroticos-Club-X
... días.» «¿Y por qué no vamos a lo de Carilinda? En el barcito tiene un par de piezas.» «Pero hay que pagarlas.» «Pero entre los dos podemos pagar una hora…» «De cualquier manera tengo que sacarme de encima todo esto. No estoy tranquilo. No puedo hacer nada. No puedo relajarme. ¿Entendés? ¡No sabés las ganas que tengo!» «Está bien. Espero… ¡No me queda otra que seguir practicando con el consolador!» Menos mal que la convencí. Al mediodía fui al comedor. ¡Justo Celina! ¡Dios, otra más! ¡Carajo! ¡Dios está en mi contra! Hay semanas en que no pasa nada, y ahora que tengo la posibilidad de coger con tres… ¡Me cago con las entregas y los parciales! Celina vino con su mejor sonrisa a mi lado. A ella la había conocido acá, en el comedor universitario. Estudia economía. La habíamos pasado muy bien en su departamento, que comparte con cuatro compañeras. «¡Mi amor! ¿Cuándo venís a casita?» «Cuando me saque todo el despelote de encima. Tengo entregas y parciales, todo en estas dos semanas.» «¿Aunque sea una chupadita?» «¿Dónde?» «Vamos al baño. Dale.» No podía negarme. Eso no iba llevar mucho tiempo. Ya lo hicimos varias veces. Entramos a un retrete. No hacían faltas palabras. Me paré sobre el inodoro y desabroché el pantalón. Celina se puso a mamar inmediatamente. Lo hacía muy bien, tenía mucha práctica y le gusta mucho. Me bajé los pantalones. Llegué con las manos bajo su blusa para amasarle las tetas. Ella me apretó los glúteos. Tranquilamente llegaba la garganta. Sus besos, ...
... caricias, lengüetazos, lamidas… ayudaban. Un montón de besos en el glande activaban la calentura. Pasaba la lengüita por el agujerito. Gozaba tanto como yo. Me miraba y sonreía. Ninguna palabra. No “despertar” a nadie. Cuando sentí que me venía tomé su cabeza. ¡Era el momento! Ella, como siempre, preparada para recibir, tragar y no derramar. Tuve que hacer gran esfuerzo para no gemir… Cuando tragó todo me la agarró con ambas manos y limpió muy prolijamente… «¿Sabés? Tenés gustito como si hubieras acabado antes. ¿Te masturbaste o te chupó otra nena?» «¡Nooo! -Me acordé de Paulina y su mamada mañanera.- Me hice una paja pensando en las ganas que te tengo…, y cuanto hace que no cogemos…» «¡Sos un amor!» «Silencio…, shhh…» Cambiamos los roles. Celina se paró sobre el inodoro. Le saqué la bombacha y la puse en el bolsillo. Me acomodé los pantalones. La hice dar vuelta y le besé el culito. A ella le gusta mucho sentir mi lengua en el ano. Luego giró, y me dediqué a su conchita. Hermosa. Suaves vellos rubios y rizados. Buena lamida en los labios externos e internos. Lamidas al clítoris. Por debajo de la blusa le amasaba las tetas. Ella me acariciaba el cabello. Cuando me clavó los dedos anunció su orgasmo. Apretó mi cabeza con una mano y con la otra se tapó la boca. Tratamos de estar en el máximo silencio, aunque no era nada raro que las parejas usaran el baño, sean heteros o lesbianas. En los baños de mujeres no entraban dos muchachos. Los homos iban al de varones. Luego de acomodarnos la ...