TAREAS EN EL HÍPER - Relatos Eróticos

TAREAS EN EL HÍPER

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-¡Qué lindas papi! ¡Qué lindas las que elegiste! Fíjate cómo me queda. – ¿Jazmín es inocente o provocativa? Realmente, como le había dicho a la madre cuando se fueron a bañar…, ahora están iguales… ¡las dos peladitas! Labios y raja de madre e hija iguales, salvo el tamaño. Esta criatura será tan hermosa como la mamá.
Y siguió con la ropa, desnuda, vestida, con conchita al aire, con culito al aire, con pezoncitos al aire. Parece que todo lo luce para que “papá” la viera. Luego de casi una hora se decidió. Me tomó del brazo y me hizo agachar. En un momento, con sus pezones como dedales, cerca de mi boca.
-Papi…, en verdad te digo… Creeme. Si hay algo que no te gusta, o te parece muy caro…, lo dejamos. 
-Quiero que lleves todo lo que te gusta…
-Pero yo…
-Lo hago por tu mamá.
-Mamita te gusta mucho, ¿verdad?
-Si…, mucho…
-¡Ay “papi”! ¡Te amo! – Me dio un beso en la mejilla.
Salimos del probador. Hasta zapatos con taquitos se llevaba. ¡No se salvó ni el loro y yo menos que ninguno!
Volvimos a la casa. Jazmín llena de bolsas. Como tiene llave, entramos directamente. ¡Cuando Danna vio las bolsas casi se muere!
-¿Qué hiciste? ¿Todo eso? ¡No puede ser! ¡Vamos a devolver! – Danna estaba enloquecida.
-¡No, no, ni se te ocurra! Es un regalo para la original e inteligente alumna de quinto grado que tiene el mejor promedio de la escuela…
-¡Tú qué sabes!
-Fui a averiguar…
-¡Eres tremendo! Solamente dan información a familiares directos…
-Les dije que soy el ...

... padre.
-¡Qué!
-Claro. Soy tu nuevo esposo. Total… ¿qué saben?
-¡Ay Dani! ¡Dani! ¡Te adoro! - Jazmín se colgó de mi cuello.
-Bueno… Danna…, ahora me voy…
-No… ¡Quédate “papito”! ¡Jajaja! 
-No puedo tesoro. Tengo que hacer. Trabajo para vivir…
Luego de abrazos y besos por parte de Jazmín…, y “muchas gracias” por parte de Danna, subí y me fui. Espero que por un tiempo la nena me deje en paz… Ahora me interesaba que Danna volviera a tomarse dos horas “para ir al médico”.

Al otro día, Danna estaba con el ceño fruncido…
-¿Qué pasa?
-Jazmín me dijo que pasó… - Danna hablaba muy seria.
-¿Qué pasó qué cosa?
-Me dijo que entraste al probador para verla desnuda…
-¡Nooo…! ¡Eso nooo! Ella me llamó “papi” para que fuera a ver cómo le quedaba la ropa. No es cierto que entré para verla desnuda. Me daba vuelta cuando se desnudaba para cambiarse.
-Es lo que me dijo. – Danna insistía.
-¿Por qué miente con eso?
-Es lo que me dijo…
-Está bien, chau. - Y me fui a otra caja a pagar los alimentos. Al día siguiente ni me acerqué a Danna. Si ella creía eso, no sería yo quien insistiría en lo contrario. Estaba buscando los yogurts, cuando alguien a mi lado me hablo.
-Dani…
-¿Qué? ¡Eh! ¡Dejaste la caja!
-Pedí permiso para ir al baño… Quiero que me perdones…
-¿De qué? – Yo seguía con cara de orto.
-¡Perdón! ¡Perdón! ¡Fue un chiste de Jazmín!
-¡¿Cómo?!
Lo hizo como una broma, para hacerte enojar. ¡Es tremenda! Me dijo que tú siempre estás de buen humor. Hoy me dijo que no era cierto. Que ella ...