NUEVOS AGUJEROS 2 - Relatos Eróticos

NUEVOS AGUJEROS 2

... “mamaba”…, así la llamaba, a meterse la pija dentro de la boca. – El glande estaba frente a sus ojos. Lo miraba a lo “visco”. Me costaba mantenerme serio. 
-Bueno tesoro. Probala, dale un beso. – La acerqué a la boca. – Un besito…, en la puntita…, dale…
	Se lo decía despacito y suave, no quería que pensara o sintiera que era algo imperativo. 
¡Al fin lo hizo! Con timidez, pero a mí me recorrió una descarga eléctrica cuando sentí sus labios…
-¡Oh Dani! ¿Te lastimé?
-¡NOOO! ¡Me recorrió electricidad por el placer que me diste!
-¿Si? ¿Te gustó?
-¡Muchísimo! ¡Nunca, nadie, ninguna mujer lo hizo tan lindo! – Darle seguridad es fundamental. – Ahora pasá la lengüita por todo el tronco… Si, así, tomalo con la mano… Eso es el tronco.
-¡Que calentito Dani! – Ofelia está encantada. Sin que yo le dijera nada me besaba el tronco. – La “señora Clotilde” me decía que se lo besaba todo…, y luego lo metía en la boca. Así… - ¡Y se la metió! ¡Me la tuve que apretar en la base para no llenarle la boca de semen!
-¡Siiii, nena! ¡Qué maravilla! ¡Esperá, esperá un poquito! 
-¿Por qué Dani? ¿Te molesta?
-No mi amor, no, para nada. ¡Es tan lindo como lo hacés que…, bueno…, me… dan ganas… bueno…, luego te explico. Además… ¡quiero besarte yo!
-Ah, sí. La “señora Clotilde” me decía también, luego el esposo la besaba a ella…
-¿Te decía como se ponía para que él la besara?
-Bueno…, de muchas maneras…, pero…, al principio, luego que ella se la chupara…, cuando empezaban…, generalmente la ...

... ponía en el borde de la cama…
-Ah… ¿si? ¿Cómo? ¿A ver? – Quería que la iniciativa la tomara ella, para acostumbrarla.
	Se acomodó en el borde.
-Si, claro. Muy bien, abrí las piernitas. – Me arrodillé y le tomé las piernas para levantarlas. – Fui casi delirante a su conchita. ¡Totalmente maravillosa! Besé los labios mayores…, abrí la rajita con los dedos. Lamí desde abajo-arriba, arriba-abajo, llegando al culito. Chupé todos lo juguitos posibles…
-¡Ay! ¡Ay! ¡Me hago pis! ¡Dani… ay, me hago! ¡No puedo contenerme!
-¡No te contengas, tesoro! ¡No es pis! ¡Te lo quiero tomar todo, síííí! - ¡Algo de otro planeta! Gusto a vainilla…, dulzón…, levemente ácido… ¡Lo más rico del mundo! Seguí con todo. Una y otra vez, le lamía la concha, el culo, todo…, y Ofelia seguía lanzando jugos. ¡Y todavía no había ido a su clítoris!
-¡Ay Dios, Dani! ¡Qué rico! ¡Qué lindo es! ¡Me siento tan feliz! – Me acariciaba el cabello. – ¡Sos tan bueno! ¡Qué lindo es todo con vos!
-¡Yo también soy muy feliz, amorcito! Pero tenemos que terminar…, sino tu papá se va a molestar…, y no te va a dejar venir más… a “visitarme”… 
-¡Ay Dani! ¡Quiero que me hagás todo lo que hacíamos con la “señora Clotilde”!
-¡Lo vamos hacer, amor! ¡Si, claro! Pero… tenemos que tener cuidado. – No quería hablarle de lo que significa el estupro…, seguramente no le interesaría para nada. – Nos lavamos, vestimos y vamos a la ferretería…
-Primero tenemos que ir a la casa de la hermana de la “señora Clotilde”…, para confirmar el ...