Me encanta ser la amante de mi entrenador - Relatos Eróticos

Me encanta ser la amante de mi entrenador

... comencé a lamer el ano y pasarme hasta sus huevos. Yo movía como loca mi lengua adentro de su ano. Él se masturbaba con fuerza.

Después de un tiempo me dijo: "Vamos al cuarto" y me cargó sin dificultad para luego de subir las escaleras y abrir la puerta de su habitación echarme a la cama.

Jorge: Empinate, perra.

Me puse de perrito y el comenzó a lamerme el ano y la vagina, pasando su lengua por ambo lados.

De pronto su glande comenzó a circunnavegar mi culito.

Jorge: ¿Lo quieres, puta?

Yo: Sí, papi

Jorge: Dímelo

Yo: Quiero que me rompas mi culo, por favor.

Jorge me volvió a lamer el ano, lo escupió y comenzó a introducir su verga. Dolió un poco pero ya adentro se sintió delicioso. Comenzó a nalguearme cada vez más fuerte, con las bombeadas su verga entraba cada vez más a mi culito, el cual se iba expandiendo más y más. Se acomodó un poco para con su pie izquierdo pisarme la cabeza sin sacarme su miembro de mi ano.

Jorge: ¿Así te gusta ser humillada? ¿Te gusta que los hombres te humillen?

Yo: Sí, me encanta, porque soy una puta. Dije entre mis gemidos y los él. Eso hizo que subiera la intensidad, enserio mi ano estaba a punto de reventarse.

Sin sacarme la verga el se recosto y me puso a cabalgarlo de espaldas. Yo me puse en cuclillas para que su verga se clavara mucho mejor en mi culo mientras le cabalgaba. Le me recostó sobre él y la verga se salió de mi ano. Nos estuvimos recostados respirando muy agitados.

Jorge: ¿Quieres seguir ...

... cogiendo?

Yo: Sí, quiero más.

Mi tiro boca abajo en la cama y el se puso arriba de mi, introdujo su verga en mi vagina para continuar bombeando, montandome como un cogelón experto, apoderándose de su putita. Luego si sacarme su verga me puso de lado y continuó con mete saca mientras me apretaba las tetas y el cuello. Me dijo al oido quiero que veas esa foto. Se refería a una foto grande que tenía colgada en un lado de la habitación era una foto con su esposa, ella vestida con su vestido de novia y el con su elegante traje.

Yo: Cojo mejor que esta pendeja, ¿verdad?

Jorge: Sí, eres mucho mejor que ella, dijo mientras subía la intensidad.

Yo: ¿Yo soy mejor que ella?

Jorge: Sí, lo eres, eres una experta cogiendo a pesar de que estas bien morrita.

Yo: Soy una diosa en el sexo...

Jorge: Eres la más puta, me encanta, todos los hombres matarían por estar contigo... Superas a cualquier esposa o novia.

Esas palabras me excitaron mucho....mucho... ¡mucho! y me deje llevar... mis ojos se pusieron en blanco y un calambrito recorrió mi cuerpo...

Otro orgasmo, muy rico, estaba ya en otra dimensión, casi veía borroso jajaja. Mis tetas rebotaban, cuerpo estaba muy flojo y mis piernas comenzaron a temblar, comencé a gemir super fuerte, pero a la vez fueron gemidos que evidenciaban mi cansancio.

Jorge ¿Estas cansadita? ¿Estas cansadita por la cogida?

Noté que Jorge también estaba super sudado, sentía como mi espalda se llenaba de su sudor.

Yo: Es que coges ...