1. 39.000 A.C.


    Fecha: 11/11/2023, Categorías: Transexuales Autor: Liver96, Fuente: CuentoRelatos

    ... sintiendo un cosquilleo en los testículos, lo folló con más fuerza. Orrgh gimió y sintió una extraña pulsación dentro de su trasero, creciendo tan rápido y extendiéndose a sus bolas y luego a su pene erecto, sintiendo la necesidad de liberar un poco de orina. Luchó contra ese sentimiento pero no pudo resistir por tanto tiempo, y aulló salvajemente y dejó que el agua amarilla saliera, unos pocos disparos; pero en lugar de eso, unos chorros calientes de color blanco salieron expelidos con gran fuerza de su polla y exclamó a gran voz.
    
    Arbahh gimió y empujó su polla dentro de su culo y Orrgh sintió un líquido cálido y espeso bombeado directamente en sus entrañas. Ella lo abrazó y le acarició el hombro y la espalda, el neandertal sintió que el agua amarilla que había salido a chorros era más espesa de lo normal, cuando notó un líquido blanco espeso cubriendo su vientre y pelvis.
    
    Se quedaron así por un momento, luego Arbahh se levantó. Se sintió débil pero extrañamente satisfecho después de lo que hicieron, Arbahh le sonrió y besó sus labios por última vez y se puso sus pieles de lobo y se alejó. Orrgh se quedó allí mucho tiempo, una de las cosas que se le quedaron grabadas en la memoria fue ese hermoso rostro y esos fascinantes ojos verde ...
    ... oscuro, estaba seguro de que no la olvidaría tan fácilmente.
    
    Y eso fue cierto en algunos aspectos. Primero, de su culo se escurría el mismo líquido blanco espeso que su polla había soltado, el mismo líquido que tenía en su vientre. En segundo lugar, su belleza estaba más allá de la imaginación y la realidad, con dificultades se vistió de nuevo y caminó de regreso al bosque lenta y cuidadosamente. Su culo aun le ardía y dolía, además de sentir una constante sensación palpitante, pero estaba complacido después del extraño encuentro íntimo.
    
    Sus amigos lo encontraron minutos después, todos preocupados y saltando, haciendo gestos y ruidos preocupación pues habían escuchado gritos. Orrgh no les respondió y, señalando con la mano la cueva, regresaron juntos.
    
    Salieron de esa cueva seis días después y encontraron otra a varios kilómetros de distancia. Cuando estaban encontrando algunas presas o frutos, Orrgh estaba sentado fuera de la cueva, se sentía mucho mejor en ese momento. De repente, desde un grupo de árboles, escuchó un ruido extraño y se puso de pie con cuidado con su lanza preparada. Una silueta alta y esbelta salió de entre los árboles y Orrgh sonrió... Arbahh los estaba siguiendo, su amada mujer tenía una gran sonrisa en su rostro... 
«12...10111213»