Mi infidelidad y las ventanas
Fecha: 25/02/2024,
Categorías:
Infidelidad
Autor: Analucy Torelo, Fuente: CuentoRelatos
... mucho tiempo, debo irme.
Al salir de su taller, él se levantó para despedirse. Debido a las cajas de material en el taller, el espacio se redujo considerablemente y ambos quedamos muy cerca del otro frente a frente.
-Disculpe -dijo él.
-No importa- Respondí y me dirigí a la puerta.
Curiosamente él no retrocedió demasiado para dejarme pasar, al pasar junto a él rocé casi imperceptiblemente su paquete. ¡Me sentí desmayar al sentir la magnificencia de su miembro!
Salí rápidamente mientras él se despedía sonriente desde la puerta del taller.
Al llegar al auto, estaba completamente húmeda, mi respiración se había incrementado y sentía un calor indescriptible. Tomé un par de minutos para relajarme y conduje al hospital.
Alberto durmió en el hospital. Yo me fui a casa y me masturbé imaginando a Alejandro, penetrándome con su magnífica verga y tras varios orgasmos me dormí satisfecha.
La interrogante seguía rondando constantemente mis pensamientos. ¿Sería capaz de llevar a cabo mi fantasía?
Después de todo, Alberto siempre fue un esposo modelo. Era doloroso que postergara la casa a la segunda prioridad, pero realmente nuestro matrimonio estaba bien, no había porqué complicar las cosas.
Resolví dejar a ese hombre fuera de mis pensamientos lo evité a toda costa y solo hablé con él por teléfono para saber el progreso de la remodelación y así alejar mis pensamientos de mi incomprensible fantasía.
Transcurrieron 2 semanas y Alberto se recuperaba ...
... rápidamente, aún no podía caminar sin las muletas, pero el resto de sus actividades regresaban a la normalidad, incluido el sexo.
Yo me sentía muy caliente después de 2 semanas sin sentirlo y en la primera oportunidad que tuve, le realicé una felación que lo puso muy duro y a pesar de la operación, logró hacerme llegar al orgasmo.
Sin embargo, mi interior aún luchaba contra mi obscura fantasía.
4
Las reparaciones estaban completas.
Era hora de despedirme del técnico y continuar nuestras vidas. Al llamar para acordar la revisión final, me comentó que el único faltante era la puerta que sería rápidamente instalada por él durante el día.
Al llegar, a la casa pude escuchar que el reproductor de música, con el volumen muy alto a mi parecer. Al abrir la puerta de la entrada, que da directamente al baño, pude ver para mi sorpresa a Alejandro, ¡meando con la puerta abierta!
No se percató, debido al volumen de la música de que había entrado y que podía verlo sujetando su verga y dirigiendo el potente chorro al inodoro.
Yo estaba petrificada, no contaba con verlo así: con el miembro de fuera y a solas en mi casa.
Me quedé observándolo sin saber que hacer, durante el tiempo que duró su micción. Me quedé ahí, a unos pasos de él, yo creo que con la boca abierta de la impresión y mi cuerpo reaccionó involuntariamente.
Empecé a sentir mi respiración agitarse y un ligero calor que emanaba desde mi coño apoderarse de mi cuerpo. Todos los vellos de mi piel se habían erizado ...