1. Unas vacaciones con mis tías (P. 9): Un paseo con mi madre


    Fecha: 27/04/2024, Categorías: Incesto Autor: Alfil-1, Fuente: CuentoRelatos

    ... largo horizonte del mar. No quise mirar hacia abajo, tan solo sentir sus labios cuando se posaron sobre mi capullo abrazándolo cálidamente.
    
    Su lengua lo envolvió con una gran lamida por todo el contorno haciendo que mi cuerpo se estremeciera. Se había inclinado sobre mi regazo y puse la mano sobre su espalda para acariciarla. Comenzó a succionar con delicadeza hasta hacer que media polla se introdujera en su cálida boca y baje la mano lentamente hasta llegar a su culo. Levante la camisola y lo deje al aire, deleitando mi vista viendo cómo se movía al ritmo de sus inclinaciones.
    
    Lo sobe de una parte a otra sintiendo todo su contorno bajo mis dedos, tan solo cubierto por la fina tira del tanga. Sus chupadas aumentaron haciéndose más sonoras para el deleite de mis oídos. Noté como su otra mano se metía bajo mis huevos sobándolos con delicadeza. Notaba mi polla plenamente estirada y tersa con la sensación de que iba a reventar y baje con mi dedo hasta el centro de su culo. Comencé a pasar la punta del dedo por el comienzo de su esfínter sintiendo esa delicada piel.
    
    Cambió su posición de sentada hasta ponerse de rodillas, facilitándome el manoseo sobre su culo y lo entendí como una señal de aceptación a mi manoseo. Contemple la escena deleitándome en ella, algo que soñaba hace tiempo y que comenzaba a cumplirse.
    
    Sus chupadas se hicieron más profundas y pude sentir mi glande penetrando en su garganta. Cerré los ojos y penetre con la punta de mi dedo en su ...
    ... esfínter varias veces hasta notar como se abría. Aumento el ritmo de sus chupadas provocando que todo mi cuerpo se tensara. Impulsivamente le di un par de azotes sobre la carne dura y tersa del culo.
    
    -Me voy a correr mamá! Me voy a correr!
    
    Jadee al sentir como una bocanada de semen recorría el interior de mi polla. Fue algo instintivo, como un aviso para que supiera lo que iba a suceder.
    
    La leche salto como una ráfaga en su boca, y para mi deleite comenzó a tragar sin dejar de chupar. Después llegó otra, y otra, y su maravillosa boca seguía tragando y chupando al mismo ritmo. Noté varios estertores en mi cuerpo hasta que salió la última gota, las chupadas amainaron haciéndose cada vez más lentas hasta que cesaron. Sacó la polla de su boca y levantó la cabeza para mirarme mientras se relamía los labios.
    
    -Te ha gustado, hijo? Me dijo con una sonrisa encantadora.
    
    -Me ha encantado mamá! Ha sido delicioso!
    
    Cambió su sonrisa poniéndola algo pícara.
    
    -Sabes una cosa! Tienes una polla riquísima, y esos azotes en el culo me han gustado! Nunca me los habían dado!
    
    Me sujetó las mejillas con las dos manos y me besó en los labios con el sabor de mi semen. Cuando se separó vi en su cara dibujado el entusiasmo aderezado con la felicidad.
    
    -Ufff, ha sido genial! Creo que habrá que repetir en algún sitio más cómodo, si lo deseas!
    
    Creo que desearlo era poco, más bien lo ansiaba.
    
    -Claro mamá! Lo estoy deseando ya! Contesté con más entusiasmo que ella. 
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