1. El pozo del diablo


    Fecha: 16/05/2024, Categorías: Dominación / BDSM Autor: Aslam56, Fuente: CuentoRelatos

    ... consuelo piensa qué de salvar a las otras jóvenes y a las almas aprisionadas quizá y solo quizá nuestros pecados sean perdonados. Tenemos que arriesgarnos
    
    Con ese plan Helene cargó las bolsas de su mantel de copal. Carmen hizo lo propio con el hígado y corazón del pez. Hincadas imploraron ser llamadas a la presencia del oscuro. Se les concedió.
    
    Al bajar a la cámara infernal dejaron sus ropas en donde siempre. Desnudas se presentaron al demonio. Al oler sus cuerpos, les dijo, tapándose la nariz
    
    - ¿De dónde vienen qué apestan horrible? ¡No se acerquen a mí! Regresen a sus casas y no vuelvan hasta que ese nauseabundo olor les desaparezca. Me enfurece esa hediondez
    
    – ¿Maestro qué tanto nos amas? – Preguntó Carmen.
    
    El maléfico, salido de sus casillas, contestó
    
    – Mucho pero no lo suficiente para deshacer el trato. Tendrán que ir por sus nietas y entregármelas. Última vez que les tolero la necedad de quererlas salvar. ¡Largo!
    
    Contestó Carmen
    
    – Deseamos salvarlas. Libéralas por favor. Pide lo que quieras pero déjalas ir
    
    El diablo, contestó – ¡Dije largo!
    
    El demonio, dubitativo pensaba en el olor de ellas. En sus adentros, se decía
    
    – Ese aroma me es conocido ¡No recuerdo por más que me esfuerzo!
    
    Las abuelas fueron a vestirse. Luego Helene y Carmen, teniendo a sus espaldas una llama encendida, llamaron al oscuro. Éste teniéndolas cercar, volvió a percibirles el olor, y dijo
    
    – Ahora apestas mil veces más
    
    Calló por unos segundos y refirió
    
    - ...
    ... ¡Ya recordé! ¡Huelen igual al padre de Albertina! ¡Fuera de aquí!
    
    Helene, valientemente, le dijo
    
    – No nos iremos hasta que rompas el pacto
    
    El oscuro, replicó
    
    – ¡Me desafían! Mis niñas no me hagan enojar ¿No saben que puedo hacerles crujir los huesos? ¡El pacto se cumplirá!
    
    Eso bastó para que Helene arrojara el copal a las llamas. Carmen hizo lo mismo con las vísceras del pescado. Un abundante humo invadió el recinto. La Bestia gritó
    
    – ¡Traidoras! ¡Quiten eso que me ahogo!
    
    Helene, manifestó
    
    – Libera a todas las nietas que deben victimizarse y rompe todos los pactos con tus amasias
    
    Carmen, agregó
    
    – También has de liberar a las almas prisioneras
    
    El demonio, tosiendo, les mencionó
    
    – Eso que queman no ha de durar mucho tiempo. Se les acabará y las mataré
    
    Helene, gritó
    
    – ¡Obedece Cynocephalus! ¡Ahora!
    
    Él en medio de fuertes dolores que lo llevaron a arrastrarse, respondió
    
    – Piedad, piedad, les juro que el pacto no se puede romper
    
    Ambas, con severidad, dijeron
    
    - ¡Rómpelo! ¡Cynocephalus, rómpelo!
    
    El demonio llorando, dijo
    
    Es imposible. Puede ser modificado pero no roto. Deben darme la libertad y algo valioso para ustedes a cambio de ellas
    
    Helene, dijo
    
    – Nuestras vidas y almas nos son valiosas. Quedamos a cambio de ellas
    
    El humo cesó, el demonio se levantó, enfurecido grito
    
    – Largo todas menos ustedes dos. Cúmplase la modificación al pacto de forma inmediata. Tan enfurecido estoy que nunca más quiero volver a ver a ...