Traiciones y golpes de suerte
Fecha: 18/05/2024,
Categorías:
Infidelidad
Autor: Anónimo, Fuente: RelatosEróticos
... trabajo, no sin antes decirle a Álvaro que esta vez sería la última y si lo volvía a ver se atuviera a las consecuencias.
Al ver el nombre del edificio, me di cuenta de que era la empresa de la familia de Laura. Ella fue mi única amiga cuando éramos jóvenes, después ella se fue a estudiar al extranjero y yo empecé mi vida de ladrón. Aun y todo nos solíamos felicitar el cumpleaños y en navidades. No podía arruinar la empresa de la familia de Laura, cuando mis padres murieron, ella y su abuela fueron las únicas que se preocuparon por mí.
Doña Consuelo era una mujer dura, pero justa y aunque no le gustaba el rumbo que iba a tomar mi vida. No me juzgo, ni me prohibió ver a Laura, después Laura se fue y mi relación con las dos mujeres se fue enfriando. Tenía un teléfono que Laura me facilito en una de las veces que me felicito en mi cumpleaños, esperaba que todavía funcionara.
Marque el número y espere a que alguien contestara, tuve suerte y fue Laura, su voz era inconfundible.
• Hola, ¿quién llama? – dijo Laura.
• Soy yo Alex, ¿me recuerdas? – dije.
• Como no iba a acordarme del chico más guapo del barrio.
• Laura tú como siempre bromista, tengo que hablar con tu abuela y contigo, es urgente.
Laura se dio cuenta de que no bromeaba y quedamos para esa misma tarde, escogí una cafetería que ninguno frecuentábamos. De esa manera no nos reconocerían, estaba nervioso. Como les dices a esas dos mujeres que estas a punto de robarles y arruinarles la vida, ...
... aparecieron las dos por la puerta. Doña Consuelo venía en silla de ruedas, empujada por Laura, tengo que decirlo para esa mujer no pasaban los años.
• Bien, que es tan urgente joven – Doña consuelo al grano como siempre.
• Bien, las dos sabéis a qué me dedico, acabo de recibir un encargo para robaros los planos de vuestro último diseño.
• ¡Maldita sea, se han atrevido a ir tan lejos! – dijo Laura.
• ¿Cómo? – dije yo.
• La empresa que os ha contratado, quería que nos asociáramos y beneficiarse de nuestro nuevo diseño, es mejor que el suyo y lo saben – dijo doña Consuelo.
Las dos mujeres tenían un rostro muy preocupado, yo sonreí y les dije que tenía un plan. Robaría unos planos fallidos para esa empresa y los planos buenos los dejaría en un sitio que Laura conocía bien.
• ¿Y se lo tragarán? – dijo Laura.
• Si, porque dejaréis unos planos reales, pero con un pequeño fallo en el diseño, de esa forma ellos pensaran que exagerasteis en vuestro comunicado. De esa manera podréis sacar el diseño más adelante con los planos a salvo.
• ¡Pero te arriesgas a ir a la cárcel! – dijo Laura.
• Si, gajes del oficio.
Me despedí de las dos mujeres, volver a Laura me hizo muy feliz. Tenía la sensación de que Álvaro me iba a traicionar, me cercioraría que el daño fuera el menor posible. Llego el día del robo y entre por el tejado, era la parte más vulnerable del edificio, Doña Consuelo me hizo un plano con los puntos ciegos del edificio. De esa manera solo aparecería en ...