1. La tercera es la vencida


    Fecha: 22/05/2024, Categorías: Anal Autor: Anónimo, Fuente: RelatosEróticos

    ... así?
    
    M: ¿¿jaja…que hacemos con los chicos??
    
    Le dije que esperara 10 minutos en el auto, que me los sacaba de encima enseguida.
    
    Subi, les dije a mis amigos que me había caído mal la comida, y que me queria acostar rapido. Mucho no entendieron, pero aceptaron. Baje, les abri. Llamé a Majo.
    
    Nos reímos, la tome de un brazo y la meti en el ascensor. La agarre con fuerzas del cuello, y la bese. Mi lengua se topó con la suya, éramos dos adolescentes. Ella manoteaba mi verga, yo metía mano debajo del vestido, sentía como sus muslos se mojaban.
    
    Entramos a casa, me empujo contra la pared, se paró en el medio del living, se puso de espaldas a mí, y mientras caminaba hacia el dormitorio, se iba quitando su vestido.
    
    La luz reflejo su pelo suelto, su espalda arqueada, que finalizaba en su cola firme, dura como una piedra, donde la marca de su bikini, había dejado un triángulo de un tono más blanco al de su piel. Sus piernas eran musculosas, y en cada paso se fruncían como rompiendo la perfección de su cuerpo entero. Era una mujer hermosa, y ella lo sabía.
    
    caminó hacia mi dormitorio. La seguí. estaba tirada en el medio de la cama, esperándome. Abierta, dejando ver su vulva apenas húmeda, sus dedos habían acariciado su monte de venus, y esto había provocado un filo hilo de miel, que corría por su entrepierna.
    
    me quite el short, mi pija estaba dura como nunca. Era un fierro hirviendo. Me acomodé entre sus piernas, con mis dedos pulgares abrí su flor. Cerro los ojos, ...
    ... y se dejó hacer.
    
    Besé su piercing, y comencé a bajar. Iba haciendo círculos con mis labios, mientras mi lengua mojaba su piel. Llegué a su foco de placer máximo, la abrí con ambos dedos pulgares, un aroma a hembra en celo despertó aún más mi cerebro. Hundí mi lengua en medio de sus labios mayores, y recibí una gotera de miel, que tragué con mucho amor. Majo gemía, y tomaba mis pelos con sus manos. Mi lengua horadaba su vulva, de repente hubo un silencio, ella apenas levanto su cadera, y un hermoso chorro de su leche fue a parar a mi cara. Todo mi rostro quedo cubierto por un agua apenas dulce, mis ojos y mi nariz goteaban. Pasé mi mano por mi cara, y mientras asomaba mi cara, fui chupando los dedos, uno a uno.
    
    M: ahhh…asiiiiii…grito, y otro chorro salió despedido hacia mí, esta vez pego en mi cuello…” basta, hijo de puta, paraaaa…”
    
    Me tiro fuerte del pelo, y me saco. Me acostó boca arriba. Se metió entre mis muslos, para mamar mi pija.
    
    Yo ya había recibido una mamada de campeonato, de parte de Majo (ver “La mama de Nina”) donde en lugar de hacer una tragada completa, solo se dedicaba a pasar la lengua por el glande, y apretar suavemente mis huevos. Ahora repitió el juego. sabia que esto no duraba mucho, que yo explotaba fácil.
    
    Cuando sentía que la leche subía, a pesar del dolor, la quitaba, y la besaba, y sentía como Majo tenia entre sus labios, parte de mi jugo. Eso bajaba un poco la tensión, y nuevamente me acostaba para recibir su tragada mundial.
    
    En un ...