Con la sorpresa dentro
Fecha: 30/05/2024,
Categorías:
Infidelidad
Autor: Arandi, Fuente: CuentoRelatos
... hizo Antoine para que pasaran y tomaran algo caliente.
“No, yo creo que mejor nos vamos, ¿verdad...?”, dijo Maly pero Estela ingresó inmediatamente al chalet.
“Ya debimos habernos ido Estelita, ¿qué estamos haciendo aquí?”, le dijo Maly a su amiga cuando estuvieron solas, pues Antoine había ido a la cocina.
“Maly, una oportunidad así no la podemos desperdiciar.”
“¿De qué hablas Estelita?”
“Qué no sabes que los negros son los hombres más fértiles del mundo. Son como sementales...”
Y ahí Estela le habló a mi esposa de la (según ella) bien conocida capacidad de aquellos para embarazar a las mujeres.
Según aquella, un hombre con las características de Antoine normalmente contaba con un miembro viril grueso y largo que, por lo tanto, tenía mayor posibilidad de abrirse camino hacia el útero y así facilitar la inyección de los espermas acercándolos lo máximo posible al óvulo a fecundar.
Además de que expelían mayor cantidad de semen; cosa que claro, ella aseguraba como absoluta verdad pese a sólo basarse en rumores. No obstante, la sonsacadora expuso aún más cualidades.
Parece absurdo pero mi mujer se tragó cada una de esas palabras llegando a sopesarlas como si fueran verdad. No le pasó por la cabeza que su amiga decía aquello sólo porque se quería coger a aquel hombre. Esa era la verdad, la mujer evidentemente estaba caliente y estaba deseosa de que se la cogiera el negro.
Perdón, no tengo nada en contra de las personas de tales rasgos, pero que ...
... sólo por ello se enganchen ciertas mujeres me parece muy... bueno, en fin.
"Él podría ser el padre de tu hijo... viste su cuerpo", dijo la muy deseosa.
"¿Pero cómo...? ¿Él es negro?", respondió mi mujer señalando lo obvio.
Maly, queriendo imitar las fechorías hechas por su amiga, pretendía hacerme creer que yo la había embarazado antes de salir de viaje.
“Ay, no me vas a decir que esperabas hacerle creer a tu marido que él te había embarazado. Jorge está lejos y quién sabe cuándo regrese, no te lo va a creer. Discúlpame amiga pero no puedes hacer lo mismo que yo. Eso sería imposible. En tal caso dile que recurriste a otros medios."
“¿Otros medios?”
“Sí, no sé... inseminación artificial. Que un donante anónimo te donó sus espermas y que no sabías que era afrodescendiente, qué sé yo.”
“Ay Estela, ¡cómo se te ocurre!”
Me contó mi esposa que luego ellas tomaron café y té con Antoine y que conversaron. Él les dijo que era físico culturista, que trabajaba en un gimnasio, pero que además modelaba e incluso hacía apariciones en televisión.
No dudo que esto motivara aún más a la amiga de mi esposa, quién, según Maly, le brillaban los ojos y le sonreía coquetamente al negro macho.
Luego de un rato de plática, según me confió Maly, Estela se ofreció a ayudarle a Antoine a recoger las tazas y llevarlas a la cocina. Maly cree que fue en ese momento, cuando ellos dos estuvieron en la cocina, cuando Estela le contó sobre el motivo que las había llevado allí. Es ...