1. La naturaleza aflora en MaryCarmen, primera infidelidad


    Fecha: 19/06/2024, Categorías: Infidelidad Autor: MarydelCarmen, Fuente: CuentoRelatos

    ... charla
    
    - Lo sé, por eso son mis amigos, - la verdad es que durante las casi 2 horas que habíamos estado en la reunión, lo había pasado muy bien, la compañía de Rolando era agradable, sus amigos eran atentos y el ambiente era especialmente bueno para mí. Rolando y yo continuamos platicando durante un espacio de una media hora más en ese sofá, descubriendo que teníamos demasiadas cosas en común. El volumen de la música nos obligaba a inclinarnos un poco para alcanzar a escuchar nuestras voces. Y en una de esas ocasiones, Rolando se inclinó hacia mí y yo me acerqué pensando que quería decirme algo, cuál fue mi sorpresa cuando sus labios se posaron sobre los míos y comenzaron a moverse sobre ellos, de una manera lenta y pausada. Después de unos segundos me retiré un poco hacia atrás, pero él no lo hizo y su oscura mirada se clavó en mis ojos y tras esa mirada deshice el camino hacia atrás y regresé a sus labios que en esta ocasión ya no eran lentos ni pausados, sino agresivos y voraces, su lengua se abrió paso entre los míos y encontró mi propia lengua, ambas jugaron por unos instantes.
    
    Sentí la mano izquierda de rolando recorrer la parte externa de mi pierna hasta llegar a mi cadera y quedarse ahí por unos segundos, mi propia mano izquierda le correspondió colocándose detrás de su nuca, había perdido el control y él lo sabía, en ese instante la mano que estaba estacionada en mi cadera subió y entró por debajo de mi blusa, y llegó hasta mi seno, mis pezones reaccionaron de ...
    ... inmediato, y mi vagina se lubricó. Abrí los ojos para voltear a ver alrededor, nadie nos veía, cada quien estaba en su propio asunto, sin embargo, él lo notó, sacó la mano por debajo de mi blusa y me dijo “espérame aquí” y fue directamente con el dueño de la casa, le susurró algo al oído y el dueño de la casa apuntó rumbo a las escaleras, y luego al techo, por supuesto que sabía de qué se trataba, ese era mi momento de levantarme e irme. Rolando venía caminando hacia mí y cuando llegó a mi lado me extendió la mano derecha. Fui tras de él tomados de la mano, rumbo a las escaleras, subimos los 16 escalones y llegamos a la planta alta y entramos por la segunda puerta, y ahí estaba una habitación amplia, con una cama matrimonial en el centro y el sonido de la puerta cerrándose con seguro detrás de mí.
    
    Rolando no tardó mucho tiempo, enseguida sus labios volvieron al ataque, tomando los míos, los cuales le correspondían con autonomía. De ahí paso a mis pechos sin pasar por un punto intermedio y los acariciaba con pasión mi respiración se agitaba y mis manos se posaban sobre su abdomen. Cuando comencé a sentir su mano derecha lidiando con los botones de mi blusa, me separé un poco para darle más libertad de acción y en ese momento tomé los bordes de su playera y la levanté por encima de su cabeza, tenía un torso bastante bien trabajado y me dispuse a recorrerlo con la punta de mis dedos. Mientras él se deshacía del último botón de mi blusa, y la empujaba hacia atrás sacándola por ...
«12...101112...»