En el medievo (P. 5): Teodon encula a Sahara
Fecha: 20/06/2024,
Categorías:
Anal
Autor: Alfil-1, Fuente: CuentoRelatos
... asombrarse al sentir como los dientes de Teodon tiraban de uno de sus pezones.
– Madre de Dios! Como me estás poniendo!
– Como? Dijo el muchacho.
A Sahara le pilló por sorpresa la pregunta. - Pues...muy caliente!
– Solo caliente? Otra pregunta inesperada.
-Si, muy caliente! Por que? – Mi madre me dice otras cosas! Comento él.
– Como qué?
- Pues... como… guarra, salida, zorra… cosas así!
– Ahhh, y te gusta?
– Síii! Mucho!
- Vale, entonces te gusta que te digan guarradas, jajaja!
Río alegremente Sahara. Al muchacho se le enrojecieron las mejillas y asintió con la cabeza.
– Vale, pues te diré todas las guarradas que se me ocurran, pero sigue chupando! Sahara miró al miembro que manoseaba ya fuera del pantalón y le pareció más gordo que la vez anterior. Estaba erecto y duro, con un capullo redondeado que brillaba especialmente. “Joder, que gorda la tiene este cabron” Pensó mientras lo apretaba con su mano para sentir más la dureza. Dentel le chupaba los pezones de diferentes maneras, les pasaba la lengua, los succionaba con suavidad, otras veces con fuerza, les daba mordisquitos suaves y otras veces tiraba de ellos con los dientes. A Sahara le estaba encantando, parecía que a este chico no tendría que enseñarle, y sobre todo, la estaba poniendo especialmente guarra. Ni Deva, la esclava de Iván, le había chupado los pezones así, y eso que Deva sabía de sexo.
– Que bien te ha enseñado tu madre! Me estas poniendo más caliente que el hierro ...
... de una fragua! Además de muy guarra! Dijo finalmente con una sonrisa lasciva.
– Mi madre me ha enseñado muchas cosas! Dijo el muchacho con sonrisa orgullosa.
– Creo que en Irenat vas a triunfar con las chicas!
– Tu crees? No sé si les gustará todo lo que se hacer!
– Cuando lo prueben, les encantará! Ya te lo digo yo! Mira como me has puesto los pezones, están como dos fresas maduras y duros como garbanzos!
Sahara seguía masajeándole la gorda polla que estaba como un pepino de color carne.
– Que te gustaría hacerme ahora? Preguntó ella mientras ya sentía su coño húmedo. El chico se ruborizó un poco.
– Pues… me gustaría follarte por detrás! Ella le miró con sonrisa pícara.
– El coño o el culo? – Los dos! Dijo el con cara lasciva.
– Los dos?
– Si, los dos! Primero el coño hasta que te corras y después el culo!
Ella intentó no reírse. Veía que el muchacho aspiraba a mucho.
– Crees que harás que me corra sin correrte tu? Le dijo con una sonrisa interrogante.
– Creo que hasta te correrás dos veces! Dijo él orgulloso y seguro de sí mismo. Sahara le volvió a mirar la polla sin soltársela, la sintió dura y también el deseo de tenerla dentro. Se giró sobre la roca en la que estaba apoyada y se inclinó levemente sobre ella. Teodon miro el delicioso cuerpo cubierto por la estropeada tela. Paso la lengua por sus propios labios humedeciéndolos. Sus manos bajaron hasta el borde bajo del vestido y lo subió lentamente. Apareció el culo de la muchacha ...