Mi esposa rompe las reglas (V)
Fecha: 21/06/2024,
Categorías:
Infidelidad
Autor: rickmaster16, Fuente: CuentoRelatos
... amor. La rubia, Corina, agarró la verga de George, esposo de Sofía y sacó de mi coño, se puso en cuatro y se encajó aquello.
Ya éramos seis en la cama. Se me ocurrió algo… grité “¡Alto!” y todo el mundo dio un brinco y se quedó quieto. “Todos a ella” dije señalando a la rubia alta. Aquello les encantó, los tres hombres se enfocaron en ella como lo habían hecho conmigo, uno en cada orificio. Sofía, la chica latina se acostó a mi lado y empezó a tocarme. Corina gritaba, su culo no estaba del todo adecuado y no era su esposo el que la tomaba por ahí pero lo recibió con estoicismo.
Tony tu esposa tiene ese culo apretado, ¿no le das mucho por ahí?- Dijo Leandro.
Todos rieron.
A que no aguanta dos vergas por detrás - dije yo.
Fue un reto. Corina me miró, separó más sus piernas y dijo “vamos, dos”.
Leandro y George se adelantaron. Tony, su esposo vino con Sofía y conmigo.
Pusieron sus vergas sobre el culo de Corina y empezaron a empujar.
aaah!!! hijos de puta!!! aaah- Gritaba.
No va a poder - dije yo.
Me miró desafiante y apretó los músculos. Lo iba a conseguir a toda costa. Lograron meter la mitad de sus vergas cuando Corina se desplomó del dolor. Un hilo de sangre corría por las vergas de los sujetos. Ella se retiró un momento al baño. La siguiente fue Sofía recibiendo las tres vergas. Ella sí podía con todo, como yo. Se puso en cuatro y sujetó cada falo en dirección a cada agujero. Me encantaba ella, era sexy, atrevida, interesante.
Ellos estaban ...
... entretenidos con ella. Yo me volteé a ver a la esposa restante. No estaba en su silla, estaba de pie frente a la piscina dándonos la espalda con su elegante vestido verde. Fui hasta ella.
¿Y tú qué? - le dije.
Yo nada corazón
¿No te gusta participar?
Sí, pero ha pasado tantas veces ya que no es algo nuevo
Lo nuevo tiene que venir de tu mente
La tomé de la mano y la llevé adentro.
Amigos, mi hermana es virgen, no quiere serlo más - les dije.
George sacó su verga de su esposa y vino hacia nosotros, tomó la otra mano de la esposa de Leandro, Rosario. Fuimos juntos a la cama.
No tienes nada que temer, es algo natural - le dijo a Rosario mientras le bajaba el panty y le subía el vestido a la cintura.
Me senté en una silla, todas las vergas estaban ocupadas, pensé en ti, en lo que te gustaría esto, también pensé en que probablemente estarías follandote a otra chica en este momento, quizá a una de mis amigas. Me entró un sentimiento de tristeza, miré a mi alrededor y a mi lado había una mesita con trago y drogas, a la mierda la tristeza, tomé un poco de todo y fui a la carga. Agarré el primer par de nalgas que vi, eran las de un hombre, no importó, las separé y metí mi lengua. Para ser un grupo de gente que organizaba aquel tipo de aquelarres no eran muy creativos porque cada cosa que se me ocurría resultaba una novedad para ellos. Las chicas me imitaron. Yo me retiré y cada uno tomó el trasero de su marido para aplicarle una lamida profesional.
El ...