Unas vacaciones con mis tías (P. 12): Desayuno y siesta
Fecha: 23/06/2024,
Categorías:
Incesto
Autor: Alfil-1, Fuente: CuentoRelatos
... Sus manos abrazaban mi cuerpo sobando mi espalda y mi culo, acompañado mis lentos movimientos. Mi polla entraba y salía de su coño, despacio, disfrutando de cada penetración. Dejaba de besarla para mirar su cara de placer y lamía su cuello y sus mejillas para sentir sus jadeos. Dirigió de nuevo mi boca hasta sus tetas deseando que se las comiera de nuevo mientras la follaba, y así lo hice, mi prioridad era culminar todos sus deseos. Le devoré las tetas con ansia, las lamí embadurnándolas con mi saliva, y succione los pezones como si fuera a sacarles la leche, noté que le gustaba como se lo hacía y eso me produjo más satisfacción.
- Diossss, cielo! Como me gusta lo que me haces! Me estás volviendo loca!
Dijo besándome la cabeza a la vez que imprimía más fuera a mi culo con sus manos para sentir más profundamente la penetración. Me atreví a morder con cierta fuerza sus pezones, estaba tan salido que deseaba hacerle de todo y no me contuve.
- Aghhh! Siiii! Siiii! Diossss! Que guarr…
Se contuvo y no terminó la frase, aunque era fácil de deducir. Noté que se estaba reprimiendo, el pudor y una educación religiosa llevaban años ahogándola, y no se atrevía a descorchar la botella y dejar salir toda esa espuma contenida. No quise forzarla y dejé que decidiera el momento.
Metí una mano bajo su delicioso culo agarrándolo con fuerza para que sintiera más las penetraciones. Giró levemente su cuerpo para dejar más espacio a mi mano y alcance el centro de su culo con uno ...
... de mis dedos. Su corrida había bajado hasta el y lo sentí mojado, eso facilitó que pudiera meterle la punta con suavidad.
- Ufff! Diosss! Que me haces! Me estás volviendo loca!! Ahhh!
Se volvió a correr mientras clavaba sus uñas en mis glúteos.
- Bésame! Bésame! Me gritó al ver que la miraba.
Ahora ya fue un beso lascivo, caliente y feroz, que nos envolvió en pura lujuria. Cuando despegamos los labios su mirada había cambiado, era la misma mirada felina que había visto en mis tías y mi hermana.
- Sigue! Sigue! No pares! Me dijo con la boca ligeramente torcida.
No sabía si se refería a mi polla o a mi dedo y decidí seguir adelante con los dos. Seguí bombeando con mi polla, aumentando ligeramente el ritmo a la vez que introducía más profundamente el dedo en su culo.
- Dios mío! Como me gusta! Sigue! Muévelo! Muévelo!!
Me gritó a la vez que movía su culo intentando seguir el ritmo de mi dedo.
- Ahhh! Siiii! Ahhh! Joder! Has hecho que me corra otra vez! Diosss! Nunca me había puesto tan guarra! Se atrevió a decir finalmente entre jadeos.
- Me encanta ponerte así de guarra!
Le contesté para hacerle saber que me había gustado esa palabra. Ahora sonrió de forma pícara y lasciva mientras sentía como seguía bombeando su coño.
- Quiero sentir tu leche dentro de mí! Dijo sin parar de moverse al ritmo de mis penetraciones.
- Vamos, suéltame un buen chorro como el que me soltaste ayer en la boca!
Recordé la escena cuando me lo dijo y me puse más ...