1. La buena esposa


    Fecha: 30/07/2024, Categorías: Dominación / BDSM Autor: Anónimo, Fuente: RelatosEróticos

    ... ocurrió.
    
    Aún habiendo tomado un somnífero no había forma de dormirse, llevaba casi un hora removiendose en la cama. Cuando cerraba los ojos volvía a ver a aquel hombre, se preguntaba porqué sabía cosas de ella y de su esposo, pero lo que no la dejaba dormir eran otras cosas, como notar su pene en sus nalgas, su dedo acariciándole el muslo, su voz susurrando “Puta”. Por tres veces había llamado a Juan, las tres sin respuesta. Eran algo más de las doce cuando cogió aquel papel para llamar por el móvil; ni siquiera sabía que le iba a decir, pero ya no podía más, necesitaba oír su voz.
    
    - Hola.
    
    - Creía que tardarías más ¿Qué quieres a estas horas? ¿No puedes conciliar el sueño? Mañana tienes que madrugar, seguro que ya estás en la cama.
    
    - Sí. Lo siento si te he molestado José. Perdona.
    
    - Vaya qué confianzas te tomas, ya me tuteas y me llamas por mi nombre. Creo que vas muy deprisa, demasiado.
    
    - Discúlpeme señor...
    
    - Esto está mejor y ahora dime qué llevas puesto, qué te pones para dormir.
    
    - Solo llevo bragas, señor.
    
    - Qué poco sugerente. Levántate, ponte la blusa blanca, abotonada. Se que la tienes.
    
    - Sí, sí señor.
    
    - Pues te levantas, te la pones y vas al salón comedor, frente a la ventana. No me hagas esperar.
    
    - Pero…
    
    - ¿Pero qué? Espero que no me hayas llamado a estas horas solo para charlar.
    
    - Ya..ya voy..señor…
    
    Descalza, solo con aquella blusa y las bragas negras, situada frente al ventanal del salón comedor, se volvía a preguntar ...
    ... cómo sabía de ella, de su piso, de su vida aquel hombre, al que nunca, antes de su primer encuentro en el metro, había visto en su vida.
    
    - Desabróchate despacio la blusa, quiero ver tus pechos, quiero saber si realmente vale la pena dedicarte parte de mi tiempo.
    
    - Me pueden ver señor.
    
    -¿Y qué que te vean? Solo pensarán que eres lo que siempre has deseado ser. Así. Tienes unos bonitos pechos, como imaginaba, seguro que son muy sensibles. ¿Verdad?
    
    - Sí, sí señor…
    
    - Y pensar que tu querido esposo estará pagando para darse un revolcón con alguna jovencita teniendo lo que tiene en casa. Ahora escúchame bien: Mañana ,cuando bajes del metro, te diriges a la primera calle a la izquierda, en medio de la calle encontrarás una sex-shop, vas a entrar en ella. Al fondo hay unas cabinas, entra en la del centro y no olvides cerrar la puerta. Tienes que llevar cinco monedas de euro, si no las tienes descambia en el mostrador, esto te dará para casi media hora de videos, eres suficientemente lista para saber cómo funciona aunque no hayas estado nunca en una de estas cabinas.
    
    - No me haga hacer esto, por favor señor, yo solo, solo quería conocerle un poco más.
    
    - Pues ya me estás conociendo. Ahora vete a dormir, si puedes, y mañana haz lo que te he dicho.
    
    José, Don José para ella, colgó la llamada.
    
    Llevaba un buen trecho andando camino de su casa. Por descontado no pensaba ir a la sex-shop que le había indicado José. Aún no sabía porqué había accedido a hacer lo que ...