1. Nuestro cumpleaños BDSM


    Fecha: 12/08/2024, Categorías: Dominación / BDSM Autor: DominAma, Fuente: CuentoRelatos

    ... no me gusta estar así, por el riesgo a que cualquier vecino pueda verme desnudo, caminando a cuatro patas detrás de ti y con un collar y correa de tu mano. Como una perra, que es lo que soy. Cuando finalmente abres la puerta, te sigo atropelladamente, y me apartas con tu pierna exigiéndome calma.
    
    Pasamos a casa y te sientas en el sofá. Estás cansada de toda la jornada del viernes y es tarde, pero interpreto perfectamente tu mirada y me acerco hasta colocar mi cabeza justo en tus botas, y sin decir nada, comienzo a lamerlas. Al principio con cautela, pues no estoy seguro si es lo que deseas, pero enseguida escucho tu voz:
    
    “Cómo me gustas, preciosa. Sigue lamiendo. Las quiero perfectas”.
    
    Nada más decirlo, siento como tu falda y tus bragas caen sobre las botas, y sin decir nada, las saco por tus pies mientras continúo con mi labor. Noto que abres tus piernas y en ese preciso instante soy consciente de que te estás masturbando. Comienzo a escuchar tu respiración cada vez más agitada, pero cuando intento levantar mi cabeza para dirigirme a tu precioso coño, me dices con la voz ronca que se te pone cuando estás excitada:
    
    “Pedro, mi amor… ¿pensabas lamer mi coño después de que tu lengua haya limpiado mis botas?”.
    
    Sé lo que tengo que hacer inmediatamente. A cuatro patas me dirijo a la cocina y te traigo un estropajo y jabón, y te encargas de limpiarme la lengua adecuadamente. Cuando terminas me dices que te quite las botas y que siga con tus pies.
    
    Con mi boca ...
    ... lista, me dedico concienzudamente a tus pies. Me vuelven loco. Primero paso mi lengua por cada dedo. Rodeándolos en círculos pequeños, que voy trazando cual delineante. Con precisión milimétrica los trato con mimo, con deseo y con pasión, pero soy tan puta que no puedo evitar meterlos en la boca y simular que te estoy haciendo una mamada. Y por si fuera poco te busco con mi mirada cuando noto que rozan mi campanilla.
    
    En ese momento puedo ver perfectamente que estás jugando con el vibrador rosa que te regalé y siento que tienes los ojos perdidos. Siento perfectamente tu placer a través de tus bonitos ojos verdes, y lo cierto es que la intensidad de tus gemidos y el ruido de la vibración, me indican que estás decidida a correrte por primera vez.
    
    Con una mano masajeo un pie, mientras con la otra lo sujeto mientras sigo lamiendo sin parar. Y entonces ocurre. Estaba tan concentrado lamiéndote los pies que casi no sentí el fuerte tirón de la correa, acompañado por tu pie clavándose en lo más hondo de mi garganta. En ese momento, y todavía sorprendido por la forma en la que tus pies me están follando la boca, te escucho decirme:
    
    “¿Tienes ganas de chupar, no princesa? No te preocupes, que te vas a hartar de hacerlo”.
    
    Y comienzas a empujar tu pie rítmicamente hasta el fondo de mi garganta. Sientes mis arcadas, pero no liberas un ápice la presión de tu correa, ni tampoco la fuerza con la que tus pies taladran mi garganta. Siento que me viene una arcada, pero sigues empujando tu ...