¡Me viola un tipo amable! ¡Hasta casi le agradezco!
Fecha: 15/08/2024,
Categorías:
No Consentido
Autor: MikeFed, Fuente: CuentoRelatos
... Tranquila.
Guiándome con sus manos, fui bajando hasta sentir que entre mis piernas estaba una de sus piernas. Me senté, cerré un poco las piernas apretando la suya. Pude darme cuenta que era la pierna de una persona que hace ejercicios, musculosa, con los costados firmes.
Su boca volvió a mi cuello, mis hombros, mis ojeras; una de sus manos a mi pecho más sensible, la otra a mi espalda. Yo cada instante, cada beso, me excitaba más.
-Tranquila, no te voy a lastimar. Me repitió mientras me besaba el cuello.
Por mi calentura, comencé a levantarme menos de un centímetro y frotarme con mi entrepierna en su pierna. Me convencí que era un tiempista tremendo cuando al darse cuenta, bajo su boca a mi pecho, y nuevamente comenzó a chuparlo, besarlo y succionar mi pezón.
Fue demasiado. Trate de rodear su cabeza con mis manos, pero la cadena lo impedía, me frotaba cada vez más fuerte y más rápido contra su pierna. Él no cambiaba su forma de darme placer en mi pecho. No pude evitar un orgasmo, en realidad, lo busque. Cuando lo tuve apoye la cabeza en su hombro, me quedé quieta y él se detuvo también.
-¿Estás bien? Me pregunto.
-Sí. Dije escuetamente, porque por pudor no le podía decir que estaba maravillosamente bien.
-Me alegro. Vení. Me dijo y me puso de pie.
Sus manos quitaron mi tanga lentamente. Estaba parado frente a mí, su boca volvió a mis pechos y fue bajando en medio de pequeños besos mientras sus manos lo acompañaban al costado de mi cuerpo. ...
... Instintivamente y por mi excitación, separe las piernas.
Llego hasta mi entrepierna y con suavidad, empezó a jugar con mi clítoris, sus manos a recorrer mis piernas acariciándolas.
Estuvo varios minutos haciendo eso, besando, succionando y “molestando” con su lengua mi clítoris, hasta que tuve otro orgasmo. Se levantó, se puso detrás de mí, y me hizo apoyar en su pecho. Ahí me di cuenta que estaba desnudo. Su pija, de muy buen tamaño, en largo y grosor, estaba dura. La sentía entre mi cintura y el comienzo de la raya del culo.
Volvió a besar mi cuello, una mano a mi pecho sensible y la otra, a mi entrepierna, acariciándome muy suavemente. Yo estaba super caliente, sentía que mi cocha chorreaba fluidos. Esperaba que me meta los dedos, hasta lo deseaba, pero no lo hacía. Yo tiraba la cabeza hacia atrás y a un costado, para dejar que su boca “trabaje” mi cuello.
Mis manos, buscaron su mano en mi pecho, y la apretaban contra él. Era un placer indescriptible. Estar recibiendo ese placer, sin violencia, sin brusquedad, y sin ningún tipo de apuro era increíble. “Puedo estar así por horas” pensé y no pude creer lo que pensaba. Me estaban abusando, como iba a pensar eso. De esa forma me saco un tercer orgasmo.
Me hizo poner de rodillas. “Ahora va a hacer que se la chupe, y se acaba toda la ternura”. Pensé. No fue así. Sentí como su cabeza pasaba entre mis rodillas, estaba acostado, y mis pantorrillas al costado de su cuerpo. Quería poder mirarme.
Tomándome de la cintura, me ...