Nuevas experiencias en mi haber
Fecha: 01/09/2024,
Categorías:
Infidelidad
Autor: Ishtar, Fuente: CuentoRelatos
... Viagra?”, pregunté al ver duro tronco y el babeante glande coronado por una gota de presemen. “No es necesario, estás deliciosa y tu sabor estimula mucho”, dijo al penetrarme de un solo envión. Se movió y sentí un chorro caliente dentro de mí, el cual me hizo moverme hasta lograr el orgasmo y, simultáneo a mis contracciones, vinieron dos chorros más de semen que me obligaron, involuntariamente, a tener contracciones en la vagina y soltar más jugos. Aunque la acción se había completado plenamente, el pene continuó tieso por un momento más, chacualeando en el mar de excreciones que aún soltábamos… ¡Delicioso!
Con José encima de mí, empecé a sentir una somnolencia abrumadora y quedé dormida, ¿o me habré desmayado? Sentí que José se quitó de encima. Cuando desperté, José me dijo “Por lo visto no habías dormido bien por coger tanto”.
–Sí, cogí mucho. No sé cómo se despertó mi marido, pero a mí se me hizo tarde porque yo me quedé en la cama cuando él se fue. Me vestí rápido para no llegar tarde contigo. Perdóname por venir sin bañarme, y sin limpiarme –expresé ante su atento y sonriente rostro.
–Pocas veces me ha tocado chuparte así, muy cogida y siempre me has sabido muy rico, pero hoy fue lo máximo, ¡aún estabas con escurrimientos del amor, tus piernas sabían a Gloria! –dijo esto último entornando los ojos.
–¿Te gustó chuparme así, con semen? –le pregunté asombrada.
–No es el semen de tu esposo, que no ha de saber mal, sino su mezcla con los jugos que sueltas ...
... cuando te vienes –confesó.
–¿Ya has probado a otras así? –pregunté conteniendo los celos, pero sabedora que José se ha cogido a muchas.
–¡Claro! por eso me gusta más chuparme a las casadas… –externó sin prejuicios.
–¿Prefieres que venga a ver así, cuando nos veamos? –pregunté recordando que el amante de Mar le pide que llegue muy cogida a verlo.
–¡Sí, bien cogida y salpicada de amor! –suplicó.
–El día de tu santo no voy a poder, porque empieza fin de semana largo, pero lo ocuparé para coger con mi marido todo lo que pueda. Ya verás el martes como quedo. Pero si traigo algo de leche en el cuerpo, me la limpias con la lengua, ¿eh…? –le advierto con descaro y sólo recibo una sonrisa y un movimiento de asentimiento con la cabeza.
Me quedo pensando que raras veces me queda semen en otra parte, pero sí voy a traer lo que me quede de una cubana que haré antes de dormir el lunes, más lo que ordeñe en la mañana del día de “San Benito Juárez”, como decimos para hacer repelar a las tías santurronas.
Ahora soy yo quien se pone a chupar paleta y José me acomoda en 69 para saborear el atole de amor que hemos hecho. Otra cogida y nos metemos a la regadera antes de despedirnos.
En casa, repaso los relatos de Mar para saber qué hacer cuando tenga que ordeñar a mi marido. Llega el sábado y desde temprano, mi marido y yo nos encamamos. El domingo, mientras mi marido se baña, yo hago el desayuno sólo con la bata puesta, y desayunamos después que él se viste. Me meto a bañar, ...