1. Salida, la milf


    Fecha: 21/10/2024, Categorías: Incesto Autor: Ivanvorpatril, Fuente: CuentoRelatos

    ... ella?
    
    Me preguntó con mucho cachondeo. Como si él tuviera que protegerla.
    
    - Creo que me gusta toda la familia. Y mis intenciones son las más sucias y pervertidas que puedas imaginar.
    
    - Tengo mucha imaginación. Y a mí también me gusta lo pervertido y morboso.
    
    Sara interrumpió ese intercambio de no tan veladas insinuaciones apareciendo desde su dormitorio. Venía espectacular, lo único que cubría su cuerpo era un camisón de raso, de tirantes que descubría sus hombros tan pecosos como los míos. Le dejaba un escote espectacular donde lucía sus voluminosos pechos y bastante cortito, así que sus muslos aparecían desnudos casi al completo.
    
    Ambos la mirábamos con la boca abierta embobados ante esa exhibición de pura sensualidad. No podíamos conocer las dudas que la habían asaltado mientras se despojaba de las ropas de calle. Pero una vez decidida estaba claro que no se cortaba un pelo. Vino directa hasta mí y volvió a sujetar mí cintura para darme un húmedo y lascivo beso ante las narices de Mario.
    
    No hacía falta mucha imaginación para deducir que bajó el ajustado slip del chico su polla depilada crecía al vernos juntas.
    
    - Vaya dos preciosidades pelirrojas. Creo que no me necesitáis para nada. Me voy a jugar a mi cuarto, os dejo solas, tres son multitud.
    
    Sara me miraba a los ojos cuando le respondió.
    
    - Creo que a ninguna de las dos nos molesta que te quedes, cariño. ¿No te gustaría mirar?
    
    - Pues claro. Pero no creía que tú lo quisieras, mami.
    
    La que ...
    ... contesté fui yo.
    
    - Creo que le puede el morbo de la situación y a mí también. Me gustaría que te quedaras y le dieras tu apoyo. Creo que nunca ha estado con una chica.
    
    - Tu eres la primera, pero me gusta el sexo y quiero probar contigo y quiero que mi hijo esté con nosotras.
    
    Vino con las dos y nos rodeó con sus fuertes brazos. Giré la cabeza lo suficiente como para incluirlo en el beso. Ella no se separó y un segundo más tarde juntábamos las tres lenguas. Hasta ese momento pensaba que podría follar con los dos pero por separado.
    
    La idea de un trío no se me había pasado por la cabeza. Ya estaba muy caliente antes pero esa situación me estaba poniendo a mil, a punto de correrme sin tocarme apenas.
    
    De hecho empezaba a sospechar que puede que aunque yo fuera la primera relación lésbica de ella es posible que entre ellos ya hubiera habido algún roce o por lo menos deseo.
    
    Enseguida empecé a notar manos por mi culo, subiendo la tela de la faldita y agarrando directamente la carne de mis nalgas. Libre por el reducido tamaño de mi tanga. Yo también empecé a subir su camisón y me dí cuenta que ella no se había puesto nada bajo el raso. Así pude deslizar un dedo por el poderoso culo y llegar a su ano, mojado con sus propios jugos.
    
    Cuando quise darme cuenta mi falda estaba a mis pies y los dos tiraban de la blusa para desnudarme. En cuestión de segundos sólo estaba con el tanga, Mario con su slip pero con la polla asomando y su madre con el camisón recogido en la ...
«1...3456»