1. Esclava del placer


    Fecha: 12/11/2024, Categorías: Infidelidad Autor: vule69, Fuente: CuentoRelatos

    ... dilatado coño, tímidamente al comienzo, mas poco tardé en aumentar la presión y velocidad.
    
    Los primeros gemidos no tardaron en escucharse. Estuve lamiendo desde su ano hasta su clítoris por al menos un par de minutos. Su coño cada vez más excretaba cantidades no menores de lubricantes fluidos.
    
    Suavemente me alejé medio metro para verla. Se besaba apasionadamente con mi amigo, el que con las manos no paraba de acariciar sus maduros senos. En el instante que JC se metía casi todo un pecho en la boca, yo hacía lo propio, insertándole gentilmente, en su ya dilatado coño, mis dedos anular y corazón de la mano derecha, comenzando casi de inmediato, un movimiento ascendente – descendente que no tardó en tomar una vertiginosa velocidad.
    
    Los gemidos fueron desplazados por gritos de placer los que a su vez fueron aumentando de volumen proporcionalmente al ir acercándose al límite. El arqueo de su espalda fue la señal que precedió a su primera eyaculación.
    
    Los chorros que salían expelidos desde su coño mojaron todo lo que se encontraba a un metro alrededor, incluyéndome. Después de la sorpresa, volví a comenzar con mis dedos (los que mantuve todo el clímax en su interior), obteniendo en menos de un minuto profusas y seguidas eyaculaciones que dejaron a Valeska, apoyando hasta sus hombros, henchida de placer.
    
    Miré mi reloj de pulsera que nunca me saco. Estábamos pasados en 10 minutos y la fiesta recién comenzaba. Noté que las manos de JC volvían a recorrer el ardiente ...
    ... cuerpo de Valeska y que éste respondía con anhelo. Fue entonces que sin volver a pensar en la hora, me avoqué a estimular, al parecer, a una adúltera multiorgásmica.
    
    Con mi mano derecha jugaba con su empapado y erecto clítoris. Con la otra, hurgaba con delicadeza su rosado ano al tiempo que mi lengua iba de aquí para allá recorriendo todos los recovecos de su depilada entrepierna por lo que poco demoró en ser presa de su primer orgasmo.
    
    Instantes después y casi al mismo tiempo, JC en la boca y yo en su coño, insertamos lentamente nuestras vergas hasta el fondo de cada cavidad. Estuvimos haciéndole el amor por ambos lados sin cambios por casi 10 minutos. Fue cuando con mi dedo índice empecé a presionar sobre su cerrado ano. La chica de inmediato reaccionó, sacándose de golpe la verga que ocupaba su boca, sin embargo, el ritmo del mete y saca que aplicaba sobre su coño, en ningún momento varió.
    
    Valeska: no me gusta por ahí… me lo hicieron una vez y sentí mucho dolor… no…
    
    Yo: te prometo que no haré nada que te haga sentir mal… pero dale una oportunidad…
    
    La conversación fue interrumpida por un nuevo orgasmo de Valeska. Por un par de latidos del corazón detuve el movimiento, mas, transcurrido ese lapso, lo reinicié llegando prontamente al mismo ritmo que llevaba. La chica del infierno se tardó menos de 10 segundos en volver a excitarse y sin arrugarse siguió gozando.
    
    Casi al mismo tiempo reinicié también con las caricias en su ano. Sin embargo, luego de varios ...
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