Estrené a una Testigo de Jehová (I)
Fecha: 19/11/2024,
Categorías:
Erotismo y Amor
Autor: Omar89, Fuente: CuentoRelatos
... va?”, le dije, “Bien, estoy trabajando en la tienda de mis padres”, me contestó, “a ratos estudio magisterio y también doy clases de La Palabra”. “¿La Palabra?”, pregunté, “¿te refieres a la Biblia?” “Sí”, me dijo, “¿te interesa? Es un curso totalmente gratuito y no te compromete a nada”. Sinceramente, yo ya conocía bastante de la Biblia y sabía que las traducciones de los Testigos de Jehová eran malas, pero por algún motivo sentí el deseo de decirle que sí, aunque en realidad, en lo más profundo de mi alma, sólo quería meter mi cabeza en aquella falda para ver cómo tenía las piernas y bajarle las braguitas para hacerle un cunnilingus que hiciera derretir de placer a esa princesita de la Watchtower. O arrancarle esa camisa para ver qué tipo de ropa interior usaba y ver cómo eran sus pechos, acariciárselos para hacerla gozar físicamente (y quizás, espiritualmente). “Bueno, si te interesa, puedes venir un día al Salón del Reino, allí tenemos nuestras reuniones, cantamos a Dios y comentamos La Atalaya”. Le di mi móvil, y más tarde, aquel mismo día, me pasó la dirección del lugar donde se localizaba el Salón del Reino al que iba ella, que es como la parroquia de los Testigos.
Debía acudir a aquel Salón del Reino el sábado a las 7 de la tarde. Para ello, tendría que faltar a la misa de mi parroquia, algo que seguramente el padre Antonio no vería con buenos ojos. Pero por otro lado, ¿acaso el Papa Juan Pablo II no visitó una sinagoga en Roma, una mezquita en Damasco, así como ...
... una iglesia luterana y un templo budista? ¿No debía seguir su ejemplo como ecumenista? Pero seamos sinceros, el ecumenismo es lo que menos me interesaba en ese momento, sólo quería ir para ver a Alicia. ¿Pero qué si lo único que me motivaba a ir a ese lugar era Alicia? Ella tenía todo lo que esperaba en mi futura esposa, belleza física y fidelidad a Dios (aunque fuera una visión corrompida del Dios al que yo adoraba), algo que entre las católicas, salvo algunas monjas que mencioné anteriormente, escaseaba. La Iglesia Católica debía afrontar que algunos de sus preceptos habían quedado antiguos (como otros en el pasado habían quedado obsoletos) y la corrupción que había en cierta parte de la jerarquía habían alejado a los jóvenes de la Iglesia, de manera que cuando iba sólo había algunas ancianas y sólo en ocasiones especiales, como bodas, bautizos o comuniones iban chicas jóvenes, aunque tan solo fuera por compromiso familiar. Estaba claro que dentro de la Iglesia Católica estaba difícil encontrar a la princesa de mis sueños, por lo que debía probar en otros sitios. ¿Y quién sabe si lograría salvar su alma de la herejía?
Llegó el sábado y a las 7 de la tarde me personé en aquel Salón del Reino. Supongo que llamaría un poco la atención, ya que aparte de ser alto y con barba (normalmente los hombres que son Testigos van afeitados) iba vestido de manera informal. A raíz de ello, se me acercaron algunos a darme la bienvenida, hasta que Alicia apareció por fin para saludarme. Si ...