-
Samantha: Corrupción y perversión de una casada (lll) (1/2)
Fecha: 21/11/2024, Categorías: Sexo con Maduras Autor: JCerva, Fuente: CuentoRelatos
... viendo el partido cuando accidentalmente uno de los chamacos se descontó a su hijo con el balón- el viejo ahora mirando directamente a los ojos de la casada le respondía. Pensaba el viejo que ese chamaco sin duda alguna le tendría que comprar una Coca por haberle hecho el paro con su mentira. Samantha al escuchar a ese hombre reafirmar la versión de su hijo, sintió un gran alivio que todo fuera verdad y solo se había tratado de un accidente mientras jugaba. También le daba la razón a su esposo en que tal vez sobre protegía a su hijo. Tal vez ya era hora de dejar que su hijo abriera las alas, pensaba la mujer con un semblante nuevamente relajado y una sonrisa en su rostro. -Muchísimas gracias señor. No sabe lo feliz que me hace el escuchar eso- la mujer nuevamente tomando las manos huesudas del viejo le agradecía. -Y ya le dije que no soy señorita. Ya estoy viejita jijiji- con su rostro sonrojado le respondía. Sin duda alguna le encantaban los halagos hacia su persona sin importar que estos vinieran de un sucio barrendero. El viejo que no perdía detalle de su cuerpo y más ahorita que lo tenía tan cerca y hasta podía oler su dulce y fresca fragancia, veía que dicho halago la había sonrojado como si de una ingenua colegiala se tratara. En más de una ocasión había hecho ese truco con alguna que otra estudiante, la gran mayoría lo ignoraban o alguna grosería le decían, pero había unas pocas como Samantha que les gustaba y con ellas sabía que si seguía con los halagos más ...
... cerca podía estar hasta de ellas, incluso hasta algún beso en sus aguados cachetes había recibido en forma de agradecimiento de esas mocosas. Que mejor que recibir un beso de esa diosa convertida en mujer, sin duda alguna jamás se lavaría ese cachete en lo que le quedara de vida, pensaba el viejo. Así que animado por todo eso, continuo con sus halagos para ver hasta donde llegaba. -Cual vieja. Es más, cuando la vi bajar del carro pensé que era la hermana del chamaco. Se ve muy joven en verdad- subiendo y bajando la mirada, el hombre le comentaba a la contenta mujer. -Favor que me hace usted. Ya se me nota una que otra arruga en la cara- eso era mentira, Samantha lo sabía, pero tan solo quería que la siguiera adulando. Volvía a sentir ese ego femenino que sintió el día que estaba en el negocio de Doña Carmen y sin duda alguna esa sensación le agradaba mucho. -Cual- el viejo sin pedir permiso tocaba la piel suave y tersa del rostro de la mujer. -La tiene muy suavecita, ni las chamacas que estudian aquí tienen la piel tan suave- el viejo diciendo la verdad, continuaba sus caricias. -Gragracias jijiji- en un principio le había tomado por sorpresa tal atrevimiento del viejo al tocarle su rostro sin su consentimiento. Pero aceptaba que le había agradado dicho atrevimiento, aparte le causaban ciertas cosquillas sus caricias con sus manos arrugadas y rasposas. -Aparte, mira nada más ese cuerpo que te cargas. ¿Trabajas de modelo?- Goyo mirando el cuerpo completo de la ...