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Samantha: Corrupción y perversión de una casada (lll) (1/2)
Fecha: 21/11/2024, Categorías: Sexo con Maduras Autor: JCerva, Fuente: CuentoRelatos
... calle y ni modo de estar dando vueltas cómo pendejo en el carro- Erasmo por fin saliendo de entre las cobijas, mostraba su cara de pocos amigos. -Pues por eso mismo, me tienes que ir a llevar a traer la mercancía de mi ropa porque mi negocio es lo único por lo que tragamos. Porqué tú nomas te gastas el poco dinero que sacas en el taxi con tus amigotes y en andar subiendo putas al carro, ya me dijo mi comadre que te vio el otro día risa y risa en el taxi con una fulana- La mujer le recriminada mientras le arrojaba el peine con el que se estaba terminando de acomodar su cabello. -¿Cuáles putas? Esa pinche verdulera de tú comadre nomas me levanta falsos. Ni modo que no le sonría a mis pasajeras. Y deja de estarme echando en cara que a ti te va mejor en tu pinche negocio de vender ropa porqué para eso eres mi vieja y me tienes que atender cómo tu macho que soy- le decía el viejo levantándose de la cama mostrando su obeso y amorfo cuerpo moreno que sólo vestía un bóxer lleno de agujeros, más que un colador. No había explicación científica que dijera cómo es que ese par de popotes que tenía por piernas pudiera soportar el peso de esa masa de grasa. -Ya no me hagas perder el tiempo y apúrate porque si no luego no respetan que es mi pedido y se lo terminan vendiendo a otras personas- decía la señora saliendo del cuarto. -Ya ni descansar a uno lo dejan en su propia casa, chingada madre- entre maldiciones el viejo terminaba de ponerse su percudido pantalón y buscaba su ...
... playera apestosa de ayer. Después de un par horas en la que la pareja fue por el pedido y se pararon en una lonchería para desayunar. Ya se disponían para regresar a la casa. Mientras tocaban temas sin mucha importancia, en la radio sonó una cumbia. -Viejo, hay que salir este fin de semana a un bar de cumbias para bailar. Ya tiene mucho tiempo que no me llevas a bailar- la señora haciendo ciertos movimientos como si estuviera bailando le decía a su hombre. -¡No estes chingando! ¿No ves que no me anda yendo bien en el jale, de donde quieres que saque feria para ir a bailar? Aparte no vuelvo a salir a un lugar así contigo. No después de cómo te pusiste la última vez que salimos- Erasmo sin voltear a mirarla le recriminaba aun recordando los desfiguros que hizo la última vez que salieron de jarra. -¡Ay viejo! Solo fue un pequeño desliz. Aparte si me llevas a bailar te prometo recompensarte bien cuando regresemos a la casa- en un tono sugerente y posando su mano en la pierna cerca de la entrepierna de Erasmo, Doña Carmen le decía cerca del oído. -¡QUE NOOO! ¡Y NO ESTES CHINGANDO QUE ANDO MANEJANDO Y ME PUEDES HACER TENER UN ACCIDENTE!- el viejo ahora si volteando la mirada hacia su mujer le respondía entre gritos. La verdad era que le valía madres si se llevaba algún cristiano de corbata o chocaba, total no era la primera vez que estaba involucrado en algún accidente automovilístico donde él era el responsable por andar mirándole las nalgas o pechos a las mujeres ...