Relájate y disfruta
Fecha: 24/12/2024,
Categorías:
Sexo con Maduras
Autor: Fd, Fuente: CuentoRelatos
Me encantan nuestras apuestas porque sin importar quién sea quien gane al final los dos nos divertimos…
La última vez perdí y pasé una semana entera siendo su mascota, sirvienta, esclava sexual, complaciéndolo en todo lo que a su sádica mente se le ocurría, calentándome con todo lo que me pedía hacer, pero sin poder desahogarme como es debido, no me quejo desde que acepté sabía que iba ser una semana difícil, cachonda y divertida, al final recibí con creces todo el placer acumulado.
Las últimas veces le ha tocado ganar a él, pero esta vez no será así.
Desde que formuló la apuesta sabía que era un reto difícil, aprender de memoria una página de algún libro de su biblioteca y escribirla sin una sola falta de ortografía y con todos los signos gramaticales.
El cabrón quería ganar de nuevo por eso eligió esa apuesta, pero esta vez será él quien tenga que pagar.
El libro lo elegiría la suerte así que mi trabajo iba ser difícil y fuera el libro que fuera yo debería ser muy meticulosa al estudiar el texto…
Mucha gente se sorprende y me pregunta cómo es que una mujer joven, guapa e independiente está con un hombre mayor.
La mayoría supone que es porque él tenga dinero, pero nada más alejado de la realidad por lo menos en mi caso. Lo que me gustó y atrapó de él fue su amor y compañía, su madurez y seguridad, la forma que me hace sentir segura y libre al mismo tiempo es la forma en que me trata como si fuera su mayor tesoro.
Y por si fuera poco es un caballero ...
... fuera de casa donde las miradas están puestas en nuestra relación, pero en privado, cuando estamos a solas cambia por completo ahí es un depravado, medio sádico, un experto en la cama; me lleva de la mano hasta mis límites; me hace romperlos, me hace hacer cosas que jamás imaginé disfrutar, me lleva a gozar de una manera que nunca había hecho. Sabe el lugar y momento justo, sabe donde acariciar, arañar o moverse con más fuerza, sabe cuando dar un jalón a mi pelo o poner una nalgada que desborda mis orgasmos, ha llegado a dejarme inmóvil con las cuerdas y descubrir que en ocasiones la caricia más caliente viene cubierta de lana y algodón tensionando en ciertas zonas del cuerpo hasta provocar que moje el colchón del placer otorgado, es todo un cabrón en el buen sentido de la palabra, despierta un instinto animal en mí que me provoca darle todo, incluso mi orificio más pequeño virgen hasta que lo conocí a él.
Pero el sexo no lo es todo también sabe cuando lo que necesito solo es un abrazo, solo hablar o estar en su compañía en silencio, me escucha y no trata de cambiarme solo me escucha y deja que tome mis decisiones.
Me encanta como me trata, tal vez no tiene el brío de un joven, pero compensa con creces los cinco minutos de mete y saca que por lo regular los jóvenes usan sin darse el tiempo de seducir, conquistar, tocar, besar, repetir el proceso una y otra vez hasta que yo misma tenga que suplicar porque me tome. Su experiencia y perversiones las reserva para mí detrás de ...