La visita conyugal de Sofía Marian (Final)
Fecha: 30/01/2025,
Categorías:
Erotismo y Amor
Autor: Alien_system, Fuente: CuentoRelatos
... pasando mi mano de su cadera hacia sus nalgas y bajando por sus piernas hasta alcanzar pasar mi mano bajo la bata y acariciar su piel desnuda, ella solo volteaba como para decirme que me sosegara, pero ya no iba dar marcha atrás. Mis caricias hicieron el trabajo deseado sobre ella, se movió de lugar quedando fuera de la vista, quedando recargada con los brazos sobre el respaldo del sillón, no permitiendo que nada se viera hacia atrás, flexionando su cadera y quedando ella reclinada, mientras seguía con caricias atrevidas, aproveche ese movimiento de ella para poder colocarme detrás de bastidores, con el libido a mil me hinque ante ella que estaba inclinada con su colita parada y levante la bata para admirar aquellas nalgas de piel tersa, sus labios vaginales de color rosa y un poco irritados por la reciente cogida, ya con la humedad emanada por las caricias que le propinaba, ella un poco asustada debido a que nunca le habían hecho tales caricias y mucho menos mostrado su vagina a ningún hombre, lo primero que hice al ver desde angulo su panocha y ano mirándome, no dude en besar sus dos blancas nalgas, recorrí con mi boca la extensión de sus piernas y nalga. Obviamente no me negué y mucho menos dude en meter mi cara entre ese par de nalgas para meter mi lengua en ese coñito blanco, fue una delicia probar sus jugos y venidas de mi güerita, sacie mi sed en esa cavidad que chorreaba líquidos cada vez que mi lengua se introducía haciendo movimientos rápidos y con mi boca ...
... succionaba sus labios vaginales, para rematar ese juego pase mi lengua por ese ano color rosa, al principio ella se sacó de onda que yo hiciera eso, pero estaba tan bonito y limpio que no pude negarme a pasar mi lengua por los pliegues rosados de esa colita.
Mi verga estaba ya nuevamente elevado y listo para meterme en su conchita ya húmeda, abrí mi bata solo por la parte de abajo sacando mi verga y pegarme a blanca cadera, esta era una situación que ella no había experimentado antes, mi falo entraba libremente a su húmeda panocha, la adrenalina de estar en la sala atrás del sillón, penetrándola aferrado a sus caderas, guiando sus nalgas y que abriera sus piernas mientras mi falo hinchado y lleno de venas, por sus piernas chorreaba nuestras jugos que brotaban de ambos sexos, con tantas ganas que ella solo movía su cadera al ritmo que yo le marcaba, le daba unos empujones de mi verga como si quisiera meterme con todo y huevos, los sonidos de nuestros cuerpos chocando eran casi imperceptibles por el volumen de la música en la TV.
El reflejo de una vitrina frente a nosotros me hacía ver la cara de ella desencajada y se mordía los labios para no gemir, quizás no se le había pasado por su cabeza que algún día se la iban a coger de esa forma, de pie inclinada sobre el respaldo del sillón, parando la colita mientras era poseída por una verga que buscaba a toda forma permanecer dentro de las entrañas Sofía Marian y nunca salir de ahí, esa Güera me tenía embrujado y extasiado.
Sentí ...