Mi esposa argentina (parte 1)
Fecha: 06/02/2025,
Categorías:
Infidelidad
Autor: Lanfasone, Fuente: CuentoRelatos
... un rictus de placer y tal vez de dolor.
Esa noche ni siquiera me atreví a pedirle su número, cosa que si hizo Pablo. Luego cuando me masturbé pensando en ella por primera vez, empecé a imaginar que era Pablo quien follaba ese culo macizo y redondo, quien la sostenía de esos muslos llenos y musculados, que era Pablo y no yo quien se metía un pie delicado en su boca mientras sostenía sus piernas en alto y su polla taladraba ese culo perfecto y el rostro de ella se desencajaba y él decía — Me voy a correr en tus tetas de guarra, a que si, a que si— entonces exploté.
—Dice Fer que le has parecido, muy majo y que se nota que no eres un giripollas
Así me dijo Carmen y la verdad es que me jodía un poco ese papel de celestina que jugaba, porque parecía más bien una fantasía de ella, de la que Fernanda, que así se llamaba la chica argentina no estaba ni enterada; pero a pesar de todo llamé al número que Carmen me dio y dos días después quedé con ella.
Quedamos en el parque del retiro a la tarde, ella estaba vestido con una minifalda y una americana algo larga, tenía unas botas cortas de media caña, estaba espectacular, me sentí intimidado y pensé realmente que había sido un error haberla llamado.
De entrada me contó de su separación— Estuve realmente perdida, fueron siete años con él, es triste que las cosas hermosas tengan un final— no supe si alegrarme o no de que fuera tan franca conmigo, igual me quería como mejor amigo o confidente
—Pero ahora mi vida se está ...
... encauzando, revalidé el título, te conocí a ti— Ella caminaba con las manos en los bolsillos de la americana, lentamente, yo veía sus piernas enfundadas en las botitas pisar el sendero como con cuidado y pesadez, no sé si sería por el taco de las botas, pero todo ella me parecía como pesado, fuerte, con poderío físico además de erótico. La frase te conocí a ti repercutió en mi cabeza como un golpe.
— ¿Y has salido con alguien en este tiempo?— pregunté estúpidamente por no saber que decir
— Carlos tú me gustas, me gusta cómo eres— me dijo sin mirarme
Ella seguía con las manos en los bolsillos, nos detuvimos, la giré hacia mí
—¿ Y cómo lo dirías en argentino?
— Vos me gustás— dijo ella, tomé su cara entre mis manos y planté un beso suave en sus labios
Luego tomamos unas cañas en una terraza, al sacarse la americana dejó al descubierto una camiseta con tirantes, sus tetas eran maravillosas, el pezón se transparentaba, lo imaginaba grande y rosado, tuve que contenerme para no pasar de tocar solo su vientre plano y firme por debajo de la camiseta mientras su lengua jugaba con la mía.
La verdad es que seguía intimidado; a pesar de toda la confianza que ella me daba nunca había estado con semejante pibon.
—¿Querés subir un ratito? me dijo con expresión lánguida cuando llegamos al portal de su edificio. Casi preferí que nos hubiésemos despedido, estaba bastante nervioso. Después de besarnos un rato en el sofá, ella llevo mi mano a su pecho, el tacto era tan ...