1. Phuc de Vietnam (II)


    Fecha: 14/02/2025, Categorías: Infidelidad Autor: Gab, Fuente: CuentoRelatos

    ... su coño mientras oía a Phuc gemir al lado de mi oreja. Su cuerpo a la altura de su ingle empezó a temblar ligeramente, sus piernas también. Mi polla estaba grande y fuerte como un sable y recorría el coño lubricado de Phuc sin prisa pero sin pausa. El temblor en su cuerpo empezó a hacerse más evidente y se trasladó a su torso y brazos. Sus gemidos pasaron a ser constantes y más fuertes y su voz empezó a temblar.
    
    Se estaba corriendo otra vez? Era esto posible? Nunca había conseguido que una mujer se corriese mientras me la follaba. Se estaba corriendo!! Apretó su boca contra mi cara, me estranguló con los brazos y las piernas, noté su cuerpo vibrar, sacudirse como en shock mientras yo intentaba seguir sacando y metiendo la polla en ella.
    
    Sentí algo que nunca había sentido antes. Su coño se calentó aún más y lo sentí en la polla. Empezó a realizar movimientos de contracción espásmicos apretando mi polla en su ya de por sí estrecho coño. La sensibilidad en mi polla se volvió extrema pero debido a la cantidad de fluidos que estaba produciendo su coño podía seguir metiendo y sacando al mismo ritmo lento que llevaba.
    
    Esto era increíble. No había tenido una experiencia así, una mujer en trance a punto de tener un orgasmo, estrujando mi cuerpo con sus brazos y piernas, y mi polla con su coño. Hizo que mi polla se estimulara de tal forma que sentí me iba a correr también. No llevaba ni dos minutos follándomela. Tras ahogar un gemido contra mi cara, su cuerpo dio una última ...
    ... sacudida esta vez más grande, separó su boca de mi cara, apoyó la cabeza violentamente en la cama con la boca abierta a más no poder y los ojos cerrados fuertemente. Su cara era un poema, estaba tensionada a punto de explotar, su mandíbula se iba a desencajar. Durante dos segundos no emitió ningún sonido, solo un grito ahogado. Es como si quisiera expulsar por su boca un torrente de sonido pero su cuerpo no le dejaba. Yo estaba alucinando. Aumenté el ritmo en esos dos segundos empujado por mi polla que había alcanzado una sensibilidad desconocida.
    
    Y gritó de placer. Vaya si gritó. Todo lo que tenía dentro finalmente salió en una avalancha. Al hacerlo su cabeza se levantó otra vez para apoyarse en mi cuello. Sus brazos y piernas seguían estrujándome. Y es entonces, en este limbo, en este sueño, en este éxtasis sin control cuando sucedió. Mientras Phuc gritaba potentemente, mi polla empezó a tener sacudidas y comencé a sentir una sensación de presión creciente en mis huevos. No me estaba doliendo, me estaba provocando un placer indescriptible. Pero me estaba dejando sin control de mi propio cuerpo. Es como si mi polla y huevos hubieran hackeado el sistema y deshabilitado todas las funciones de mi cuerpo. Nunca había tenido esta sensación. Mi polla iba en autopiloto y yo no podía ni reaccionar. Solo sentir placer, mucho placer. Aunque mi cabeza me hubiera intentado parar, no hubiera podido. Pero mi cabeza ni pensaba en ese momento. Se estaba formando una tormenta perfecta en ...
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