1. Que hacer en tiempos de crisis


    Fecha: 26/02/2025, Categorías: Confesiones Autor: Patita Putita, Fuente: CuentoRelatos

    ... todos lados, no tardó mucho en quitarme el brassiere y sentado en la cama me chupaba los senos.
    
    Yo estaba muy nerviosa, pero me comencé a calentar y a convencerme de que para eso había ido: para ser puta. Sentí que estaba empezando a saborear el momento, a sentir placer en ser manoseada, en que me cachondeara descaradamente ese desconocido, sabiendo, además, que estaba en calidad de huila. En algún momento ya no me importó y me solté.
    
    (Ya encuerada, me paró enfrente de él sentado, para chuparme las tetas y acariciarme las nalgas, alternando con metidas de dedo por el mamey. Y unas pasaditas por el remolino del cutis. Estando así me pasó algo curioso: totalmente fuera de mi costumbre y educación, comencé a retorcerme y decir palabrones. El Gordo después me dijo que no lo podía creer).
    
    A seguir sin más ceremonia se encueró, y me hizo sentar poniéndome una vergota tremenda enfrente, no dudé, me comí ese camote grueso y oscuro hasta donde me cupo, era muy grande y gordo, sentí que me desencajaba las encías. Pero hice lo que pude, me esforcé en darle una buena mamada, pensándolo después, no fue mamada, fue face fucking. En todo caso de repente me soltó una tremenda golfada de lefa. Que me tragué sin chistar.
    
    Paramos un poco sentada en sus piernas, me seguía cachondeando algo más suavemente sobre todo las tetas, le gustaron mucho.
    
    Ya repuesto me puso al borde de la cama inclinada y me cogió, metiéndome el camote por la concha hasta el fondo. Yo solo pujaba y le ...
    ... decía:
    
    Síii… siii… así… métemelo más…siii… eres un pinche cabrón, abusando de mí… méteme tu garrote pendejo, cógete esta puta, que para eso vine.
    
    ¿Te gusta putita? ¿Así quieres tener el palo metido? ¡Estás muy buena pinche putota cabrona! ¡Mueve el culo pendeja! ¡Muévelo!
    
    Siii… sí soy tu puta cabrona, ¡cógeme más…! te estoy dando las nalgas pendejo, pinche negrote hijo de tu chingada madre.
    
    (Más tarde comentando con mi marido, me dijo que le había sorprendido mucho que hubiera mamado tan fácil, porque antes siempre había reclamado que no me gustaba. ¡Y el lenguaje! Bueno… eso había sido antes…).
    
    El padrote era de larga duración, la verga seguía dura. Vi que tenía dudas de qué hacer. Me ordenó ponerme en cuatro patas, de a perrito. Lo hice sin dudar, sospechando lo que seguiría, y aguantándome los temores.
    
    Sentí como me untaba algo, una sensación fresca. A seguir sin dudar comenzó a meterme su pepino por el culantro. Hasta que fue decente el cabrón, no fue bruto, me lo fue metiendo poco a poco. Sí me dolía, y me aguanté quejarme. ¡Ay cabrón, le dije, pinche picador! me estás enculando…
    
    ¿Te gusta chingona? Poco a poco pasó la molestia y cuando sentí sus bolas rozándome las nalgas me di cuenta de que ya tenía la polla toda metida por mi chiquito, empujándome las tripas. Comenzó a bombearme, y yo a sentir placer.
    
    Me dio mucha vergüenza en ese momento: ¡Me estaba gustando que un cabrón ojete me metiera la verga por el culo!! (¡Qué vergüenza! ¡Si me viera mi ...