1. El mejor relato erótico para mujeres 2: La casa de fantasías


    Fecha: 07/03/2025, Categorías: Erotismo y Amor Autor: Spexie, Fuente: CuentoRelatos

    ... por hora.
    
    "...lo hacemos?" - completó Lucía.
    
    E inmediatamente, sin perder más tiempo, Gabriel le comió la boca.
    
    Lucía le comenzó a sacar la ropa lo más rápido que pudo, desesperada por sentirlo. Sus besos sabían a frutilla por algún motivo, por si faltaba afrodisíaco alguno. Tenía un deseo animal desenfrenado, al punto de que casi deseaba violarlo. Le quitó el jean y la remera, luego las medias y la ropa interior. Desnudos ambos, tomó su pene con una mano, mientras la otra acariciaba su escroto. No le importaba nada en el mundo, solo quería copular con su macho y que este la haga suya. Sin embargo, decidió torturarlo un poco.
    
    "Te gustó comerme la cola?" -preguntó y vio como Gabriel apartaba el beso y se ruborizaba. Su pito comenzaba a palpitar.
    
    "Me volvió loco" -respondió, colorado como el fuego, fruto de vergüenza y excitación.
    
    "A mí más... Y pienso devolverte el favor" -dijo Lucía, y dicho esto, con una mano en el escroto, bajo sus labios hasta su pito, y sacando su lengua lamió de abajo para arriba el falo de Gabriel, quien arqueó la espalda y colocó los ojos en blanco mientras su pija se contraía pulsante. Al ver su reacción, Lucía le metió un dedo en la cola lentamente y comenzó a darle besitos tiernos en la puntita, mientras podía sentir el sabor del liquido pre-seminal. Gabriel se repuso cuando Lucía se detuvo, y los dos conectaron sus ojos al mirarse. Lucía dejó pasar 10 largos segundos y luego...
    
    Con sus labios húmedos lentamente hundió el pene ...
    ... en su boca, mientras que insertaba más profundo su dedo en la cola de su hombre. Un trecho largo, hasta que su pene estuvo completamente dentro, y su lengua llegaba a lamer el escroto, y su dedo llegó al punto más profundo que logró alcanzar. Y lo hubiera hecho de nuevo, pero sintió la pulsación final, y rápido quitó su dedo y su boca de la intimidad de su macho.
    
    "No. Así no." -dijo tajante Lucía.
    
    Gabriel se recompuso de lo que había sido una bomba de hormonas y placer, se dio un tiempo para respirar y controlar su cuerpo, intentó bajar un poco de la nube para poder hablar con su amada, su crush desde hacía tantos años, que estaba dándole el momento más increíble de su vida. Recomponiendo el aliento, la miró a los ojos para que Lucía continuara.
    
    "Así no. No quiero que acabes en mi boca. No es lo que mereces."
    
    Gabriel, estando en el paraíso, pensó que cualquier cosa que tuviera planeada su amor Platónico sería maravilloso.
    
    "Entonces dónde?" -preguntó Gabriel entre jadeos.
    
    Lucía hizo una sonrisa tierna con un toque de picardía, y con sus femeninas tetas pasó su cuerpo por encima de la pija de Gabriel, lentamente de abajo para arriba, rozando todo su cuerpo contra su miembro viril. Su pecho, su estómago... su pelvis... y paró.
    
    Lucía miró a los ojos a Gabriel y se detuvo allí. Gabriel sintió su perfume hipnotizador, y le tomó unos segundos saber qué quiso decir su hembra. Y luego creyó comprender la sugerencia, poniendo más dura su pija. Y para despejar toda ...
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