Infracciones de tránsito (parte 0): Precuela
Fecha: 13/03/2025,
Categorías:
Hetero
Autor: ElenaRmz, Fuente: CuentoRelatos
... dilatarlo un poco primero, o me desgarraras".
murmuré.
Luego inserté lentamente uno de mis diminutos dedos lubricados en mi recto. Procedí a estirarlo lentamente, y luego hice lo mismo con dos dedos.
Yo: "Ábreme las nalgas, por favor".
Ahora me estaba haciendo cargo de mi propia protección, por supuesto.
Mientras saco mis dedos, le doy una gran inyección de lubricante a mi agujero, y luego LENTA y SUAVEMENTE trato de deslizarlo dentro de mí. Él me miraba con lujuria toda mi actividad dilatadora.
Oficial: "¿Estás segura de que no has hecho esto antes?"
Yo: "Sí, vi un video". Me reí.
Salté cuando roció el lubricante frío profundamente en mi abertura.
Yo: "Oh, Dios, ayúdame"
Murmuré mientras la cabeza de su miembro presionaba contra mi ano.
Yo: "Despacio... ve lento y se gentil". Le recordé de nuevo.
Oficial: "Dime que quieres", ladró.
¿Está bromeando? Esto era lo último que quería, pero recordé la alternativa, así que respondí obedientemente:
Yo: "Quiero que me revientes el culo".
Tomé una gran bocanada de aire y gemí cuando él aumentó la presión. Estiré mis manos hacia atrás y separé mis nalgas lo más que pude. Tomando valor sostuve mis nalgas abiertas y empujé suavemente mi culo hacia él mientras él empujaba hacia mí. Grité y él gimió cuando la cabeza de su verga se metió en mi culo.
Oficial: "¡Ah, Putamadre estas bien apretadita!"
empujando con más fuerza y avanzando poco a poco más profundo dentro de mis intestinos.
Yo: ...
... "Despacito, despacito, oh Diooos".
Le recordé y gemí al mismo tiempo. Tuve visiones de él destrozándome y destruyendo mi trasero.
Oficial: "Lo quieres todo, ¿no?" gruñó.
Yo: "Siii, pero despacitoo... Un poco a poquitooo", supliqué.
Oficial: "Dilo", ladró.
Yo: "Quiero toda tu gran verga en mi culooo"
chillé con una voz aguda y dolorosa.
Envolvió sus grandes manos alrededor de mis caderas para hacer palanca. Grité cuando el resto de su verga desapareció lentamente en mi culo y sus bolas golpearon contra mi piel. Agarré las sábanas con fuerza con ambas manos y comencé a morderlas para ahogar mis gritos. El dolor ardiente en mi trasero era insoportable.
Oficial: "Ah, sí, sí",
con voz entrecortada mientras movía las caderas. Uno pensaría que anotó un gol o algo así. Gemí con cada embestida de su dura verga en mi ardiente y estirado culo.
Deslicé mi mano debajo y comencé a estimular mi clítoris, que ahora estaba aún más empapada.
Froté nerviosamente e inserté dos dedos dentro de mi cuquita hinchada. Aunque tenía dolor, estaba muy excitada. No era una persona a la que le guste el dolor, pero en ese momento… Ufff. El dolor ardiente combinado con mi estimulación me estaba acercando al orgasmo. Alternaba entre gemir de placer sexual y gritar de dolor cada vez que él se retiraba y empujaba más profundo.
Cuanto más empujaba dentro de mí, más frenéticamente me frotaba el clítoris y me toqueteaba. Mis dedos alcanzaron mi punto G mientras la palma de mi ...