1. La contadora madura pero muy caliente


    Fecha: 15/04/2025, Categorías: Sexo con Maduras Autor: RRuser, Fuente: CuentoRelatos

    ... bajo su panocha, la atraje hacia mi boca y metí mi lengua en ella, se movía rico sobre mi boca mientras mi verga estaba a su disposición para cuando quisiera probarla, lo cual terminó por hacer entre tanta calentura y así, en poco tiempo ya hacíamos un rico 69. No era muy buena mamadora, pero el calor de su boca y su aliento me hacían sentir muy excitado, con la verga a punto de explotar, conteniendo mi venida pues no sabía si a ella le iba a gustar tener mi semen en la boca, opté por aguantar mi orgasmo, poniendo atención en su disfrute, pues ella seguía extasiada con las mamadas de panocha que yo le daba, gemía y gemía, moviendo sus nalgas frente a mi cara y yo disfrutando ver su pequeño ano adornado con unos cuantos pelos alrededor. Se volvió a venir intensamente, presionando su panocha sobre mi boca, bebí hasta la ultima gota de su orgasmo.
    
    La tuve sobre mí un rato mientras se recuperaba, luego la recosté boca arriba, nos besábamos. Me dolía la verga, la sentía hinchada así que me incorporé para ponerme un condón, ella abrió sus piernas y me extendió sus brazos. Coloqué mis manos a sus costados y fue ella quien tomó mi tronco y colocó la punta de mi verga entre sus labios vaginales, yo presioné y me costó trabajo entrar pues se sentía muy estrecha, ella se quejaba un poco de dolor pero con sus manos en mi espalda me atraía para entrar más mientras yo trataba de suavizar sus gemidos besándola, en verdad estaba muy apretada. Por fin pude estar todo dentro de ella. ...
    ... Comenzamos a movernos al mismo tiempo, yo trataba de estimularla penetrándola despacio mientras con mis manos acariciaba su cuerpo y su lencería que me tenían a mil. Ella también había pasado de sus gemidos de dolor a los de placer, movía sus caderas y levantaba sus piernas buscando más placer. Y así entre besos, caricias y metidas de verga ella alcanzó su orgasmo de nuevo y yo de verla tan caliente también me apresuré a llenar el condón dentro de su caliente panocha, gemimos fuerte con nuestros orgasmos.
    
    Descansamos un rato estando mi verga dentro de ella, mientras recuperábamos el aliento, ambos lo disfrutamos mucho. Su mirada y ojos color miel tenían un efecto especial, encontrar nuestras miradas nos hizo sentir deseo de nuevo, nos volvimos a besar y a ponernos calientes. Yo seguía dentro de ella con el condón casi escurriendo y la verga se volvía a poner dura, me levanté para cambiarme el condón. Ella se colocó de perrito sobre la cama, se veía hermosa con su lencería, así que una vez puesto el nuevo condón me coloqué en su espalda y la fui penetrando despacio, ambos disfrutamos cada centímetro recorrido. Nos movíamos en direcciones opuestas, ella echaba el culo para atras y yo hacia adelante, el sonido era muy excitante combinado a nuestros gemidos. Acariciaba sus nalgas y espalda sobre el corset y de igual forma tomaba las ligas que sostenían sus medias como si fueran unas correas para atraerla hacia mí. La estuve montando como perrita mucho tiempo, ella se vino algunas ...