Dos sumisos y un perro
Fecha: 21/05/2025,
Categorías:
Dominación / BDSM
Autor: DominAma, Fuente: CuentoRelatos
... segundo me agarraste de la oreja y dirigiste mi cabeza a tu coño. Con el bikini aún en la boca, comencé a lamerlo. Estabas mojada. Me vuelve loco ver lo rápido que te excitas. Que nos excitamos. Mientras te comía el coño dijiste:
“¿Has visto las ganas que tengo del plan de mañana, mi amor?. ¿No estás contento?”.
Afirmé con la cabeza sin dejar de darte placer con la lengua y con mis dedos, y escasamente tres minutos después, sentí tu primer orgasmo empaparme la cara por completo. Me dispuse a limpiar tus propios fluidos con mi lengua, como es mi obligación en cada uno de tus orgasmos, pero me ordenaste sentarme en la taza, te subiste encima, de frente a mí y, mientras nos besábamos, agarraste mi ridícula polla y la llevaste a tu interior. Me encantaba sentir tu calor. Tu humedad, y como dándote cuenta de mis pensamientos, apretaste fuerte con tus músculos vaginales, y sentí que ibas a romperme en dos. Comenzaste a cabalgarme mientras me llamabas puta, y nos corrimos en menos de cinco minutos.
Salimos del baño como si no hubiera pasado nada, y nos fuimos directos al mar a darnos un baño. Después estuvimos tomando el sol y a las 6 subimos a la urbanización para descansar en la piscina. En un momento dado, te acercaste a mí para asegurarte que todo estaba claro para el día siguiente.
“Mi chico, quiero que te quede claro que desde que amanezcas mañana, no podrás dirigirme la palabra. Sólo podrás observar y ladrar. Dormirás en el suelo, comerás pienso en un bol de ...
... perro, beberás mi pis y estarás con la correa y la máscara de perro durante 24 horas. Cuando quieras hacer pis, te acercas a un rincón que prepararé para ti y, levantando la patita trasera, lo haces. Si quieres hacer otras cositas y tienes el plug, prefiero que intentes aguantar. Si no puedes aguantar, entonces quiero que ladres fuerte y te coloques boca arriba. Esa será la señal para que te quite el plug, pero quiero que sepas que pondré un periódico en el suelo para que hagas tus necesidades, y que no pienso limpiarlo, ni tampoco limpiarte a ti… así que tú sabrás. Te recomiendo que hoy no cenes, y que te apliques un Micralax para quedarte limpito y no pasar por ese mal trago de estar con el culo sucio durante horas”
Te contesté que a partir de ese momento solo tomaría líquidos, y que tenía varios micralax en el neceser, y que haría eso para no pasar por la humillación de estar manchado durante horas, mientras tú disfrutabas de mi sustituto y del juguete. Al dejar ese punto claro, quisiste ahondar en el resto del día:
“Mi amor. Se te van a hacer muy largas las 24 horas, porque apenas voy a mirarte. Sé que estás y que estarás bien, así que no te preocupes. Querré que estés en la misma habitación que yo siempre, pero especialmente cuando esté follando que, por otro lado… va a ser casi todo el rato. Ja, ja, ja, ja.”
Nos reímos y te dije que tenía muchas ganas de sentirme humillado para ti, pero en ese momento no era plenamente consciente de lo abajo que tenías pensado ...