Perdido por un culo
Fecha: 21/06/2025,
Categorías:
Infidelidad
Autor: Anónimo, Fuente: RelatosEróticos
... momento de la noche salí hacia la piscina y entonces vi que Roberto me siguió.
• ¿Dónde tenías escondido este monumento hermanito?
• ¡Roberto tengamos la fiesta en paz!
• ¿Sabes Marc?, yo siempre consigo lo que quiero.
• ¡Si eres listo te mantendrás alejado de ella!
• Te he investigado, sé dé lo que eres capaz, ¿me estás amenazando?
• No necesito amenazarte, Sara sabe cuidarse muy bien solita.
Lo que Roberto no sabía es que la estuve enseñando defensa personal, a cambio de que ella me enseñara vulcanología. La cosa de momento quedo allí, pero sabía que Roberto no cejaría hasta conseguir a Sara. No porque le gustara, sino para dejarme claro a mí que él era el puto amo. Yo confiaba plenamente en Sara, pero reconozco que me costaba no arrancarle la cabeza al atolondrado de mi hermanastro.
Sara tenía una hermana que trabajaba en el extranjero, su nombre era Laura. Se veían poco, pero cuando se veían eran la felicidad hecho cuerpo humano. A mí me cayó muy bien, vino a decirle a su hermana que su novio le había propuesto matrimonio, yo tenía una comida con mi padre y se me ocurrió invitarlas a comer con nosotros.
Laura al principio estaba cortada, pero enseguida cogió confianza con mi padre. Entonces este dijo que porque no hacíamos la fiesta de compromiso en casa, era una casa grande con un gran terreno y si terciaba había piscina para el que quisiera bañarse. A Laura le pareció una buena idea, los padres de su novio vivían en una ciudad cercana a la ...
... nuestra. De esa manera no tendrían que viajar hasta Italia donde trabajaba de médico igual que su prometido.
Una de las noches fui a la empresa para hablar con mi padre, según me dijo el segurata este hacía muy poquito que había salido. Error mío por no haberle llamado, tenía que fotocopiar unos apuntes, así que, ya que estaba allí aprovecharía. Las impresoras de mi padre eran las más modernas y eran muy rápidas, subí por las escaleras. No me gustaban los ascensores, cuando estaba pasando por el despacho de Bárbara, escuche ruidos. Al acercarme escuche lo que claramente era a dos personas follando.
La puerta estaba entreabierta, estaba oscuro, pero se apreciaba bien la parte de adentro. Dentro estaban Bárbara y Roberto follando, No podía creer lo que veían mis ojos. Eso no fue lo peor, lo peor fue todo lo que escuche entre jadeo y jadeo. Bárbara y Roberto no eran madre e hijo, sino dos estafadores que pretendían quedarse con toda la fortuna de mi padre. De una patada abrí del todo la puerta, después encendí la luz. Bárbara se tapó como pudo, Roberto sé mal entono. Se acercó a mí con intenciones de amenazarme.
Para cuando se dio cuenta ya lo tenía en el suelo, la suela de mi zapato estaba apretando su cuello, mientras este hacía ruidos. Mire a Bárbara y le dije que si apreciaban sus vidas desaparecerían de la vida de su padre, esta se vistió deprisa y salieron los dos corriendo. Yo llame a mi padre y le invite a cenar, darle la noticia no fue nada agradable. Menos fue ...