Vacaciones con mis hermanas (Capítulo I): Hermana favorita
Fecha: 07/07/2025,
Categorías:
Incesto
Autor: Ozymandias, Fuente: CuentoRelatos
... una perfecta visión hacia mí, me senté en el suelo. Intentaba apartar mi vista de su culo, pero era imposible, cómo no admirarlo si se veía tan perfecto, bastaba con estirar un poco mi mano para poder tocarlo y estrujarlo, pero debía contenerme, ella era mi hermana además de que estaba pasando por una mala etapa. En otro momento de nuestras vidas, Sabrina también se llegó a llevar bien conmigo, recuerdo que también nos escondíamos en las noches y hacíamos nuestras pijamadas a escondidas de todos, pero todo eso era pasado. Mi verga comenzaba a reaccionar de nuevo, sería muy incómodo si ella se diera cuenta, tenía que liberar estrés de una manera u otra.
—Lamento lo que pasó con…
—¡No digas su nombre! —Me calló—, fue un estúpido, no merecía estar conmigo ¿Cómo se atreve?
—Si, no se merecía una novia como tú —Añadí.
—¿Como yo? ¿A qué te refieres con “como yo”? —Eso la hizo mirarme, yo bajé la vista y crucé los brazos impidiendo que notara mi erección.
—Pues si… ya sabes.
—¿Estás diciendo que soy una horrible novia? —Su voz sonó débil, triste, como si de verdad lo creyera—, sé que no soy la más cariñosa, pero… si lo quería y pensé que se lo estaba demostrando —Ella comenzó a llorar, las lágrimas se extendieron por todas sus mejillas, me sentía impotente ¿Qué debía hacer? No podía levantarme o ella se daría cuenta de lo caliente que estaba en esos momentos.
—No, no, yo no me refería a eso, decía que una novia como tú hablando de lo bonita que eres, quién no ...
... quisiera tenerte como pareja.
—¿En serio?
—Si, obvio, todos quisiéramos estar contigo, eres la mejor de toda la universidad —Alzó la vista, parecía un poco mejor.
—Muchas gracias, yo… creo que necesitaba escuchar que alguien me lo dijera —Dijo, mientras se limpiaba las lágrimas con la manga—, ¿Cómo pudiste salir adelante después de que te pasó a ti?
—Mmmm bueno, yo simplemente supe que ella no era la indicada para mí —Ni nadie, por eso sigo solo, pero preferí omitir esa parte—, no puedes pasar todo el día encerrada en esta habitación, te extrañamos… aún con tu carácter —Eso le causó gracia.
—Gracias, enano. —se sentó en el borde de la cama—, ¿A ti también te gustaría tener una novia como yo? —Esa pregunta me sacó de mi zona de confort, ¿A qué se refería? ¿Por qué me preguntaba eso? Sabrina se puso de pie y se dio una vuelta frente a mi, lo que me dejó al mil, mi verga estaba a punto de reventar.
—Yo emmm…
—Tú dijiste que te gustaría tener una novia como yo ¿No? —Se acercó, seguía viéndose un poco triste pero ya lucía más recuperada.
—Si, cualquiera quisiera tener a alguien similar a ti… pero bueno yo, yo soy tu hermano, eso estaría mal —Respondí, nervioso.
—Si, lo sé —Volvió a sentarse—, sé que tú y yo no nos llevamos tan bien como antes, y que tu hermana favorita es Jane pero… tal vez pueda ayudarte, si tú me das algo a cambio también.
—¿A cambio?
—Si bueno, conozco a varias chicas y ellas, tal vez les intereses, no lo sé, no son yo pero, algo ...