1. Una entrañable amistad con Carmen


    Fecha: 09/07/2025, Categorías: Confesiones Autor: jc2020, Fuente: CuentoRelatos

    ... alejamiento se había hecho sentir, sabíamos que todo estaba como siempre. Los pocos compañeros que había en la sala, sabían que estábamos distanciados y que nos merecíamos aquel tiempo a solas, para poder reconectar nuestra amistad. Nadie dijo nada, era como si estuviéramos solos, en el medio de la nada, nuestras vibraciones se volvían a encontrar y formaban una sola onda. Fue tan maravilloso aquel encuentro en su casa, que hasta el día de hoy lo recuerdo.
    
    Luego de unas horas de risas, comidas y tragos, la gente poco a poco se iba retirando, pero todos estábamos contentos y muy motivados a seguir en aquel camino. Cuando ya casi no quedaba nadie, también pase a despedirme, aunque no tenía intenciones de abandonar aquella casa, y más aun sabiendo, que no se por cuánto tiempo dejaría de ver a Carmen. Ella lucia tan hermosa, tan radiante con aquel vestido color rojo que llevaba puesto, los amigos se estaban retirando, ya solo quedábamos ella y yo, Carmen me invito a tomar una copa más, le habían sucedido tantas cosas, que me pidió que me quedara un poco más, como le dices que no a una mujer tan hermosa. Fue a ponerse algo de ropa mas cómoda, ya que entre nosotros había mucha confianza y no era necesario que siga encima de aquellos tacones que le estaban machacando los pies, se soltó el cabello y lo tenía recogido hacia un lado de su hombro.
    
    No recuerdo el tiempo que demoro en salir de su habitación, yo miraba algunas fotos que tenía en su álbum, y vi una que nos tomaron ...
    ... en la oficina, la había conservado hasta ahora, nos veíamos tan felices, yo como siempre a su lado. Nos acomodamos en el sofá, copa en mano y hablando de las cosas que le habían sucedido durante todo este tiempo, en más de una ocasión nuestros ojos se llenaron de lágrimas, al escuchar la falta que nos hicimos, nuestras manos se rosaban tímidamente ante cualquier sensación de recuerdo, intentando calmar aquella ansiedad de haber estado solos en aquellos momentos. No sé si terminamos de contarnos todo lo que habíamos pasado, todo lo que habíamos dejado de contarnos durante este largo tiempo, lo que si tenía claro era que estábamos juntos nuevamente, y eso era lo que necesitábamos.
    
    Al ver la hora, que ya era casi de día, caímos en cuenta que debía partir, yo debía regresar, ella debía descansar, nuestros cuerpos debían separarse, una vez más. Pero nuestra angustia por saber cuándo nos volveríamos a encontrar era muy grande, era muy palpable en aquella atmosfera casi madrugadora. Nosotros en aquella habitación sentíamos que no debíamos separarnos. Nos besamos en los labios, nos dejamos llevar por el calor de nuestros cuerpos, era la primera vez que sentía sus labios, su aliento dentro del mío. ¿Fue algo planeado? la verdad que no, pero no importaba. Estábamos fundidos en un eterno beso, mis manos tímidamente abrazaron su cintura delgada, su espalda recta y vigorosa, sus caderas anchas y contorneadas, la tome entre mis manos como si fuera una delicada mariposa, se dejó llevar, ...