Te entregaste, gozaste y seguiste. Así te fue
Fecha: 24/07/2025,
Categorías:
Infidelidad
Autor: suruminga, Fuente: CuentoRelatos
... había posibilidad de marcha atrás así que solo quedaba pensar cómo terminar y esperar el momento oportuno, aunque significara un tremendo esfuerzo de paciencia para soportar la humillación y las burlas encubiertas. El lado bueno era que ese dolor me afirmaba más en la determinación de hacerles pagar cara su insolente maldad.
No eran muchas mis ganas de asistir a la reunión que Juan propuso hacer, en su amplia y cómoda quinta, el domingo desde media mañana hasta el atardecer. Era una oportunidad perfecta para presenciar el flirteo de mi mujer con el dueño de casa y las burlas soterradas de dos compañeros que todo le festejaban. Acepté pensando que quizá se daba la oportunidad que estaba esperando, y esa posibilidad me proporcionó la paciencia suficiente.
Promediando la tarde veo a mi jefe retirarse con el teléfono al oído para regresar casi en seguida.
- “Necesitaría que mañana vieras las ventas de la sucursal Filadelfia, tendrás tiempo?”
- “Dame un rato que me organice, acuerde con mi hermano algunas cosas pendientes y te aviso”.
Unos minutos después de cavilar sobre varias conveniencias acepté el encargo que me llevaría todo el día regresando al siguiente, lo cual dio pie a una sugerencia del dueño de casa.
- “Quizá te convendría salir ahora al anochecer así podés empezar temprano y a media tarde iniciar el regreso, por supuesto si te queda cómodo”.
- “Sí, creo que es buena idea; querida, tendríamos que irnos antes”.
- “Ay qué lástima, con lo que ...
... estamos disfrutando”.
La intervención de Juan solucionó el inconveniente.
- “Si no te parece mal, vos te adelantás para preparar tus cosas y yo más tarde la acerco a Leonor”.
- “Perfecto, le pediré a mi hermano que vaya adelantando algo. Me permitís usar tu teléfono que me estoy quedando sin batería?”.
- “Sin problemas, usalo todo lo que necesites”.
Caminando hacia la mesa donde estaban las bebidas observé la sonrisa socarrona de dos compañeros mientras se hablaban al oído. Decidido a sacarme la curiosidad de ese secreteo tomé el celular y me senté cerca simulando escribir mientras mi atención estaba en sus palabras.
- “Pobre, se la devolverán mañana con tanta leche adentro que si llora, en lugar de lágrimas, saldrá semen”.
A lo que el otro se sumó
- “Acá hay dos posibilidades, o es tan imbécil que no se da cuenta o le gusta; en ambos casos tiene perfectamente merecidos los adornos en la frente”.
Satisfecha la curiosidad me dediqué hablar con mi hermano.
- “Necesito que sigas estas instrucciones minuciosamente, 1) Te venís en taxi hasta una cuadra antes de la casa de Juan y me esperás en la esquina; 2) Traés un bolso con mis dos camperas, la negra y la verde claro, el pasamontaña, y la cajita de poxipol; 3) Tu celular debe quedar en casa; 4) Más tarde te avisaré la hora aproximada de encuentro, yo iré en el auto”.
Enviado el mensaje seguí entretenido con el móvil a falta de algo mejor, cuando escucho la voz de mi esposa.
- “Qué raro encontrarte ...